Desde su nacimiento, el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) —llamado anteriormente “Los Matazetas”— se constituyó como un grupo criminal con un solo objetivo: acabar con sus rivales.
A través de los años, gracias a los constantes embates del gobierno contra otras estructuras y a su funcionamiento a través de pequeñas células, la organización de Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”, extendió su presencia en gran parte del territorio mexicano y su violencia alcanzó un punto culminante durante la pandemia por Covid-19.
Datos incluidos en el estudio Índice de Paz México 2023, realizado por el Institute for Economics & Peace (IEP) refieren que el CJNG fue el grupo criminal que más muertes causó en 2020 y 2021.
Según refiere el documento, la información fue obtenida del Programa de Datos sobre Conflictos de la Universidad de Uppsala, en Suecia. A partir de esto, el IEP determinó que el CJNG fue responsable de más de 28 mil muertes por conflictos entre bandas delictivas entre 2020 y 2021.
Tal cifra rebasa notoriamente las casi 14 mil que estarían relacionadas con el Cártel de Sinaloa en el mismo periodo.”
“En 2015, los enfrentamientos que involucraron al menos a uno de estos dos grupos representaron el 42 % de todas las muertes por conflictos entre cárteles, pero para 2021 representaron el 95 % de esas muertes”, puede leerse en el documento.
El CJNG fue responsable de alrededor de 28 mil muertes en conflictos entre cárteles durante la pandemia. (IEP)Por debajo de las dos más grandes organizaciones delictivas del país se posicionaron el Cártel de Santa Rosa de Lima (CSRL), Los Zetas y el Cártel de Juárez como los más letales en conflictos armados.
Al revisar la evolución de las estadísticas durante las últimas dos décadas es perceptible un repentino incremento en la cantidad de fallecimientos derivados de conflictos entre cárteles a partir de 2017.
De acuerdo con el documento, esto se explica por dos aspectos principales: la expansión del CJNG y la extradición de Joaquín “El Chapo” Guzmán a Estados Unidos.
Para ese entonces, el cártel del “Mencho” ya no estaba asentado sólo en la zona centro del país, sino que había iniciado su incursión hacia el norte y el sur de la república.
A través de pequeñas células y brazos armados, el CJNG comenzó a disputar el terreno que anteriormente dominaban el Cártel de Sinaloa, La Familia Michoacana o el CSRL.
Sumado a ello, la captura del “Chapo” y su envío a EEUU para enfrentar a la justicia creó un “vacío de poder”, según el citado informe, ya que propició la disputa interna entre Los Chapitos y la facción liderada por Ismael “El Mayo” Zambada para apoderarse del mercado de las drogas en México que el cártel controlaba en un 40-60% desde 2012.
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