La actitud hostil que Eduardo Tricio Haro, accionista de Aerovías de México (Aeroméxico), mostró cuando fue vicepresidente del Consejo Mexicano de Negocios (CMN) en contra de Andrés Manuel López Obrador, se transformó en una posición moderada y, otra vez, como en los sexenios pasados, en una relación de millones de pesos con el Gobierno federal.
En la emergencia impuesta por la pandemia del COVID-19, el pasado 15 de abril, el Instituto Mexicano de Seguridad Social (IMSS) le otorgó a Aeroméxico un contrato por 776 mil 900 dólares (18 millones 428 mil 611 pesos) para el transporte aéreo de material médico, insumos y productos necesarios para hacerle frente a la propagación de la enfermedad.
Pero ese no fue el único –ni mucho menos el más cuantioso– contrato que ha obtenido Aeroméxico durante la presente administración. En el año y medio de gobierno que lleva López Obrador, la empresa en la que Tricio Haro es accionista se ha embolsado 865 millones 722 mil 236, lo que equivale a la mitad de los recursos recibidos durante los seis años de la administración de Felipe Calderón Hinojosa (1,594 millones). Las facturas cobradas por la aerolínea durante la llamada 4T también representan una cuarta parte de los contratos otorgados por Enrique Peña Nieto durante su sexenio (3,779 millones).
A ese ritmo, Tricio de Haro podría terminar el sexenio obteniendo más recursos de su antiguo ‘enemigo’, López Obrador, que de sus ‘amigos’ anteriores, Calderón y Peña Nieto.
TRICIO, EL PRIMERO EN LA FILA DEL COVID
El convenio para trasladar suministros sanitarios de China a México fue el primer contrato publicado en Compranet –la página de contrataciones públicas para proveedores– relacionado con el llamado “puente aéreo”, el mecanismo que ambos países acordaron para transportar equipo médico del país asiático hacia acá, según anunció el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, el pasado 9 de abril.
Hasta el cierre de este texto, la presente pandemia había generado una serie de compras por poco más de 1,093 millones 440 mil 490 pesos. El mayor, por 212 millones 109 mil 150 pesos, lo tenía Campas Equipos SA de CV, por venta de equipo médico relacionado con el COVID-19 al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
¿QUIÉN ES EL SEÑOR DE AEROMÉXICO?
Con 6.12 % de las acciones, Eduardo Tricio Haro es uno de los principales dueños de Aeroméxico. Otros participantes son Delta Air Lines (36.35 %), María del Pilar Carmen Haro (5.78%) y Antonio Cosío Pando con 5.02%, según la información de la empresa en la Bolsa Mexicana de Valores.
Tricio Haro también preside, desde 2000, el consejo de administración de Grupo Lala.
Fue el empresario que, en julio de 2018, a través de una inserción pagada en los medios nacionales, junto con el director de Cinépolis, Alejandro Ramírez –en nombre del Consejo Mexicano de Negocios– le envió a López Obrador un mensaje que generó polémica: “Así no”.
Se referían al señalamiento que había hecho López Obrador sobre ellos. El ahora jefe del Ejecutivo los acusó de reunirse en la clandestinidad con el entonces presidente Enrique Peña Nieto para convencerlo de que el candidato postulado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), José Antonio Meade Kuribreña, declinara por Ricardo Anaya Cortés, del Partido Acción Nacional (PAN).
En realidad, la mayoría de los miembros del CMN –una de las asociaciones que reúne a los empresarios más ricos e influyentes del país– hicieron lo posible para que López Obrador no llegara a la Presidencia. Por ejemplo, los empresarios Claudio X. González, Alberto Baillères y José Antonio Fernández pidieron a sus empleados mediante misivas, reflexionar sobre su voto. Les hablaron de lo peligroso que podría resultar en México lo que llamaron “populismo”, encarnado en AMLO.
Creado en 1962 por algunos de los empresarios más influyentes de la época, el CMN –originariamente se llamó Consejo de Hombres de Negocios– ha tenido influencia en las decisiones de por lo menos nueve gobiernos. Casi siempre con un perfil bajo –al borde de la semisecrecía, en algunas épocas–, la hemeroteca no guarda imágenes de sus reuniones, pero sí de sus manifiestos respecto a las políticas económicas. Hoy lo integran unos 60 hombres y mujeres de negocios, según analistas de empresas. Otros de sus miembros son Armando Garza, dueño de Alfa, y Daniel Servitje Montull, quien posee Bimbo.
En abril de 2019, en una conferencia mañanera, el presidente expuso que el exmandatario Felipe Calderón Hinojosa (su rival en los comicios de 2006) le entregó Aeroméxico a un grupo de inversionistas a cambio de que lo apoyaran para llegar a la Primera Magistratura. Entre los beneficiarios principales, mencionó a Roberto Hernández de Grupo Banamex; José Luis Barraza, quien era entonces presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y Eduardo Tricio, de Grupo Lala y Aeroméxico.
En esa mañanera expuso que esos empresarios contribuyeron en sembrar la idea de que “López Obrador es un peligro para México”, lema que usó Calderón en la campaña presidencial en las que el panista superó al tabasqueño con una diferencia de 0.58% de los votos. Calderón logró el 35.89% de los sufragios, mientras que AMLO, el 35.31%.
En febrero de 2019, Alejandro Ramírez dejó la presidencia del Consejo Mexicano de Negocios y Tricio Haro, la vicepresidencia. Esos sitios los ocuparon Antonio del Valle Perochena y Blanca Treviño. López Obrador fue invitado al evento de los nombramientos. A partir de entonces, la postura de Eduardo Tricio Haro se moderó. Incluso, ha acudido a algunas reuniones en Palacio Nacional.
GENEROSOS CONTRATOS
A pesar de esa relación tirante, en total, Aeroméxico tiene uno de los contratos más importantes del COVID-19 y ha recibido del gobierno de López Obrador 865 millones 722 mil 236 pesos a través de 29 contratos. La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Secretaría de Gobernación (Segob), la Fiscalía General de la República (FGR), el Servicio de Administración Tributaria (SAT), entre otras instancias, han utilizado los servicios de la aerolínea.
Los dos contratos más grandes los otorgó la FGR, uno fue por 460 millones 344 mil 827 pesos y otro por 77 millones 586 mil 206 pesos. Después, en el tercer sitio está la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, con 62 millones 68 mil 965 pesos.
En el pasado, Aeroméxico fue un proveedor privilegiado de los gobiernos. Felipe Calderón la contrató por 1,594 millones 976 mil 241 pesos, mientras que Enrique Peña Nieto le otorgó 3,774 millones 639 mil 343 pesos, según el historial en Compranet que registró el equipo de Contratobook. En esos dos sexenios, el contrato más grande lo otorgó el Servicio de Administración Tributaria (SAT) para transportación aérea nacional e internacional de servidores públicos, por 265 millones de pesos, en 2013, cuando el director general era Aristóteles Núñez, en el gobierno peñanietista, consta en el archivo del Portal de Obligaciones y Transparencia (POT).
Cuando la administración calderonista estaba por concluir, Pemex Exploración y Producción le dio uno de los contratos más altos para la transportación de servidores públicos en siete rutas trazadas entre la Ciudad de México hacia Campeche, Tabasco, Nuevo León y Veracruz.
Otro contrato importante fue el de la entonces Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa, hoy Sader), por 70 millones de pesos para, en 2014, transportar al entonces secretario José Calzada Rovirosa y algunos subsecretarios.
AEROMÉXICO EN LA CRISIS
Según las palabras de Marcelo Ebrard Casaubón, canciller de México, están previstos 20 vuelos entre China y México con suministros para combatir el contagio del coronavirus COVID-19, con una frecuencia de entre dos a cuatro viajes a la semana. La noche del pasado lunes 4 de mayo, arribó el noveno vuelo proveniente del país de Oriente, cargado con 600 cajas de googles para la protección del personal médico ante el coronavirus.
El 9 de abril, el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell, sostuvo en la conferencia que brinda a las 19:00 horas todos los días, que, frente a la crisis, “los vuelos que sean necesarios” serán contratados en aras de traer “todos los insumos que sean identificados como necesarios”.
En un comunicado, Aeroméxico informó respecto al “puente aéreo” que su flota está disponible para las necesidades que marque la pandemia, que el gobierno paga únicamente una parte del costo de cada vuelo y la aerolínea se hace cargo del resto y que sus vuelos directos a Asia están certificados para operaciones EDTO (Extended Diversion Time Operations).
La aerolínea del caballero águila apuntó también que decidió realizar operaciones especiales por la drástica caída de la demanda y estipuló tres objetivos: aprovechar la infraestructura de Grupo Aeroméxico, colaborar con “gobierno y sociedad” y generar ingresos para subsistir.
EMEEQUIS buscó la posición de Grupo Aeroméxico, pero al cierre de la edición no hubo respuesta.
fuente.-@Linaloe_RF/
A esto llegó la 4Ta.destrucción. A Pero al culero del evo si lo trajeron en avión de la fuerza aérea y los insumos médicos allí si no pudieron. Pues claro allí no había forma de robar. El gobierno más nefasto de la historia. Comprando estadios de béisbol. Gastando 1000 millones para que pinten los árbolitos de la SEP.comprando a sobreprecio respiradores médicos. Un verdadero error aver traído a este partido al poder y apenas lleva año y medio. No Una tragedia para México resultó este gobierno
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