En enero del 2012 que se implementó la reforma energética, los residentes fronterizos tenían la esperanza que la gasolina bajara de precio. Hoy, a casi siete años, por el contrario, incrementó su costo.
En enero de ese año, la gasolina Magna se vendía en 9.73 pesos, la Premium en 10.59 y el diesel en 9.82 pesos. Ese año cerró con 10.72 pesos la magna, la Premium en 11.82 y 10. 81 pesos.
A la fecha, la gasolina Magna está en 15.51, la Premium en 17.97 y el diesel en 20.22 pesos. Es decir, el combustible más vendido que es la magna, en los últimos siete años incrementó casi los seis pesos por litro lo que representa para los neolaredenses, un golpe duro a su economía.
Y es que señalan, para moverse en su vehículo una semana, del trabajo a casa, tienen que cargar 30 litros como mínimo esperando que no surja un contratiempo, porque implica, ponerle más gasolina.
Esto significa, que antes, por 30 litros pagaban 291.90 pesos, ahora, pagan 465.30 pesos, es decir, 173.40 pesos más por semana.
“Pagamos casi 200 pesos más y los sueldos siguen igual, no sé cómo es que le hacemos pero gracias a Dios seguimos viviendo, salimos adelante ajustando nuestros gastos en otras cosas, pero la verdad si que el costo de la gasolina nos ha pegado muy fuerte a nuestros bolsillos”, dijo Roberto Cortés.
Los usuarios, señalaron que tenían la esperanza que con la reforma energética, la gasolina bajaría de precio o se mantendría, sin embargo, aseguran, fue todo lo contrario.
“Yo me acuerdo que todos dijeron que con la reforma energética iba a bajar la gasolina y que por eso la habían implementado y todos dudosos pero esperanzados, y ahora, mire como nos tienen, bien amolados con la gasolina y la luz, el recibo de la luz cada vez más caro y la gasolina ni se diga, ya no puede uno moverse para ningún lado porque la piensa uno por la gasolina cara”, añadió Rigoberto Zaragoza.
De acuerdo a la asociación de gasolineros de esta ciudad, el incremento más fuerte que implementó el gobierno federal al combustible fue en enero del 2017 cuando el precio de la gasolina subió hasta en 10 por ciento, es decir, incrementó 4 pesos de un día para otro. Pero debido a las exigencias de los empresarios y amenaza de cierre debido a que eliminaron la homologación, ciudadanos preferían surtir del lado americano, dejando sin vender a las estaciones de esta ciudad se empezó a ofertar en 13.26 pesos, cambiando la homologación por un ajuste en precio el cual se retribuye a través del pago de impuestos.
“Este es el golpe más fuerte que nos dio el gobierno en la gasolina, todos los aumentos que se han dado han sido de centavo en centavos, pero ese año fue el ajuste que hicieron asegurando sería el último y a la fecha la gasolina sigue aumentando”, añadió José Luis Palos Morales, presidente de esta asociación.
Los ciudadanos y empresarios, esperan que con el nuevo gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador, se logre la homologación de los precios en el combustible.
En enero de ese año, la gasolina Magna se vendía en 9.73 pesos, la Premium en 10.59 y el diesel en 9.82 pesos. Ese año cerró con 10.72 pesos la magna, la Premium en 11.82 y 10. 81 pesos.
A la fecha, la gasolina Magna está en 15.51, la Premium en 17.97 y el diesel en 20.22 pesos. Es decir, el combustible más vendido que es la magna, en los últimos siete años incrementó casi los seis pesos por litro lo que representa para los neolaredenses, un golpe duro a su economía.
Y es que señalan, para moverse en su vehículo una semana, del trabajo a casa, tienen que cargar 30 litros como mínimo esperando que no surja un contratiempo, porque implica, ponerle más gasolina.
Esto significa, que antes, por 30 litros pagaban 291.90 pesos, ahora, pagan 465.30 pesos, es decir, 173.40 pesos más por semana.
“Pagamos casi 200 pesos más y los sueldos siguen igual, no sé cómo es que le hacemos pero gracias a Dios seguimos viviendo, salimos adelante ajustando nuestros gastos en otras cosas, pero la verdad si que el costo de la gasolina nos ha pegado muy fuerte a nuestros bolsillos”, dijo Roberto Cortés.
Los usuarios, señalaron que tenían la esperanza que con la reforma energética, la gasolina bajaría de precio o se mantendría, sin embargo, aseguran, fue todo lo contrario.
“Yo me acuerdo que todos dijeron que con la reforma energética iba a bajar la gasolina y que por eso la habían implementado y todos dudosos pero esperanzados, y ahora, mire como nos tienen, bien amolados con la gasolina y la luz, el recibo de la luz cada vez más caro y la gasolina ni se diga, ya no puede uno moverse para ningún lado porque la piensa uno por la gasolina cara”, añadió Rigoberto Zaragoza.
De acuerdo a la asociación de gasolineros de esta ciudad, el incremento más fuerte que implementó el gobierno federal al combustible fue en enero del 2017 cuando el precio de la gasolina subió hasta en 10 por ciento, es decir, incrementó 4 pesos de un día para otro. Pero debido a las exigencias de los empresarios y amenaza de cierre debido a que eliminaron la homologación, ciudadanos preferían surtir del lado americano, dejando sin vender a las estaciones de esta ciudad se empezó a ofertar en 13.26 pesos, cambiando la homologación por un ajuste en precio el cual se retribuye a través del pago de impuestos.
“Este es el golpe más fuerte que nos dio el gobierno en la gasolina, todos los aumentos que se han dado han sido de centavo en centavos, pero ese año fue el ajuste que hicieron asegurando sería el último y a la fecha la gasolina sigue aumentando”, añadió José Luis Palos Morales, presidente de esta asociación.
Los ciudadanos y empresarios, esperan que con el nuevo gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador, se logre la homologación de los precios en el combustible.
fuente.-(Imagen/Twitter)
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