El aumento del dólar frente al
peso no será sólo un tema de sobremesa en la cena navideña, sino que también se
verá reflejado en el costo de la misma.
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De acuerdo con cifras de la
Profeco y un ejercicio realizado por EL NORTE, tan solo el pavo y la
pierna de cerdo cuestan 40 y 30 por ciento más que en el 2015.
Productores de pavo y cerdo
atribuyeron el encarecimiento de estos cárnicos al alza del dólar y a la baja
oferta nacional frente a la fuerte demanda que se presenta en estas fechas.
Por ejemplo, César Quesada,
presidente de la Unión Nacional de Avicultores, refirió que para estas fiestas
decembrinas el País contará con una oferta de 3.2 millones pavos, de los cuales
un millón 728 mil fueron importados, esto es el 54 por ciento.
"(La falta de producción
nacional) hace que el mercado esté muy expuesto al tema cambiario porque se
tiene que importar en dólares de otros países", explicó.
En cuanto a la carne de cerdo, en
el Cuarto Informe del Gobierno Federal se señala que del 2001 al 2016 la
participación de las importaciones de ésta en el consumo nacional aparentemente
escaló del 28.9 al 40.7 por ciento del total.
José Luis Tamez, representante de
la Unión Regional de Porcicultores de Nuevo León, añadió que el alza de este
alimento es resultado de la baja oferta que aún prevalece a nivel mundial,
luego de que China -principal productor en el mundo- sufrió una reducción de 12
millones de vientres entre el 2012 y 2013.
"Esto hace que en México
suba el precio del cerdo, al consumidor; pero también hay que decir que el alza
del dólar no nos beneficia porque se encarecen nuestros costos, ya que el grano
que usamos para la engorda de reses también está en dólares".
En cuanto a la carne de res, que
no es tan común en la cena navideña, Juan José Córdova, presidente de la
Asociación Mexicana de Engordadores de Ganado Bovino (AMEG) refirió que, al
menudeo, en términos generales los precios de este cárnico en el País no han
podido bajar por el alza del dólar.
Pero también lo atribuyó a que
las cadenas de autoservicios persisten en mantenerlos elevados, no obstante que
en los últimos 12 meses los precios al productor han bajado entre un 15 y 20
por ciento, a nivel nacional.
"Los últimos incrementos del
dólar han influido a que no haya bajado lo suficiente la carne de res, ya que
mucho de lo que consumimos lo importamos, como son las pulpas y las
vísceras", comentó.
"El precio mundial del
becerro está bajando y por eso bajamos nuestros precios, pero el detallista no
lo ha bajado en la misma proporción y ahora menos con el dólar caro".
Aún con el dólar caro, de enero a
octubre de este año, las importaciones totales de carne de res provenientes de
Estados Unidos subieron 8 por ciento respecto al mismo lapso del 2015, revelan
cifras de la Asociación de Exportadores de Carne de res de ese país.
Pero no sólo las carnes
resintieron estos factores.
Si quiere saborear su
cena con un vino tinto o sidra deberá pagar 12 y 17 por ciento más.
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