Ante la
escasez de gasolina, la venta clandestina de combustible se disparó en 10
estados y en algunos alcanzó hasta los 40 pesos por litro.
Según denuncias presentadas ante la Procuraduría
General de la República (PGR), en Guanajuato hay puntos de venta ilegal en los
municipios de San Francisco del Rincón, Irapuato, León, Silao, Valle de
Santiago y Purísima del Rincón, donde el litro de combustible ilegal se vende
en este precio.
En la capital de San Luis Potosí, que padece el mayor desabasto, el costo por litro se ubicó en 32 pesos.
Según los reportes, incluidos los de empresarios gasolineros, en este Estado opera una veintena de expendios clandestinos.
Estos puntos de comercialización se localizan en la carretera San Luis Potosí-Matehuala, en la intersección entre Santa María del Río y Villa de Reyes.
En Michoacán, el comercio negro de gasolina se encuentra en localidades como Sahuayo, Morelia, Jiquilpan y Zamora. En Jalisco, las denuncias se concentran en Tlajomulco de Zúñiga y Tala, mientras que en el Edomex los puntos de venta clandestinos detectados están en Axapusco, Otumba y Polotitlán.
Fuentes de la PGR reportaron que las denuncias subieron desde el 19 de diciembre en Guanajuato, San Luis, Michoacán, Zacatecas, Querétaro, Hidalgo, Puebla, Jalisco, Durango y el Edomex.
La PGR y Pemex concentran en estos estados el 75 por ciento de los reportes de venta clandestina, principalmente gasolina y diesel, a través de los llamados huachicoleros, que son bandas organizadas que roban el combustible para venderlo.
De acuerdo con las denuncias, el precio del combustible ilegal ronda entre los 25 y los 40 pesos, y en algunos casos, indican los reportes, son los empleados de las gasolineras quienes informan a los consumidores los sitios donde pueden encontrarlo.
En el caso del centro del País, fuentes de Pemex atribuyen la escasez a tres tomas clandestinas que afectaron el ducto Salamanca-Aguascalientes, cuya operación ha sido intermitente.
Según informes oficiales de la petrolera, un "desfase de reparto" causa el desabasto que viven entidades como Aguascalientes, Zacatecas, Michoacán y Guanajuato.
En San Luis Potosí, Durango, Puebla, Jalisco, Guanajuato y Michoacán, el abastecimiento depende directamente de la red de ductos que cruza por Salamanca, los cuales son los que presentan mayor ordeña a nivel nacional por parte de huachicoleros.
En estas entidades, el precio del combustible se llega a vender hasta en 250 pesos el galón.
El comercio clandestino con combustible, obtenido de manera ilegal, se lleva a cabo a través de puntos localizados en las carreteras, en las ciudades e incluso en redes sociales, donde personas aprovechan el desabasto y ofrecen garrafas a sobreprecio llenas de carburante.
En Durango, donde en el último par de días se ha comenzado a agravar el desabasto de hidrocarburos, autoridades, organizaciones y ciudadanos han alertado un incremento sustancial de venta ilegal de combustible.
Carlos Güereca Prado, representante de la Organización Interamericana de Consejos Ciudadanos, advirtió el martes ante medios locales que en la capital del Estado se han detectado cuatro puntos, ubicados afuera de parques y fraccionamientos, en los que se vende el combustible de forma descarada y a la vista de las autoridades.
Lo anterior, expuso, además de ser un delito federal conlleva un riesgo para la seguridad de las personas.
"No únicamente es el acto ilegal que se está cometiendo, sino todo lo que está detrás de ello, desde la ordeña de ductos y el riesgo que se corre al abastecer unidades con el combustible sin las medidas necesarias", dijo.
En tanto, en redes sociales usuarios duranguenses ofrecen garrafas de dos galones de gasolina en 500 pesos.
En Jalisco se vive una situación similar, en la que, además de venderse de manera clandestina a más de 20 pesos el litro en Guadalajara, Lagos de Moreno y Ocotlán, en Facebook hay grupos en los que se venden 20 litros de gasolina por un precio que va entre los 500 y 600 pesos.
En Michoacán, ante el desabasto generalizado de gasolina, también ha proliferado el comercio negro en algunos municipios, como Sahuayo, Morelia, Jiquilpan y Zamora, donde ofertan garrafones de 20 litros en 370 pesos.
En Puebla, una de las entidades donde se presenta la mayor cantidad de huachicoleros, la Asociación Mexicana de Empresarios de Gasolineras (Amegas) denunció que hay una preferencia de los poblanos por acudir a sitios clandestinos para surtir gasolina, ubicados en lugares como Ciudad Serdán y Tepeaca.
En la capital de San Luis Potosí, que padece el mayor desabasto, el costo por litro se ubicó en 32 pesos.
Según los reportes, incluidos los de empresarios gasolineros, en este Estado opera una veintena de expendios clandestinos.
Estos puntos de comercialización se localizan en la carretera San Luis Potosí-Matehuala, en la intersección entre Santa María del Río y Villa de Reyes.
En Michoacán, el comercio negro de gasolina se encuentra en localidades como Sahuayo, Morelia, Jiquilpan y Zamora. En Jalisco, las denuncias se concentran en Tlajomulco de Zúñiga y Tala, mientras que en el Edomex los puntos de venta clandestinos detectados están en Axapusco, Otumba y Polotitlán.
Fuentes de la PGR reportaron que las denuncias subieron desde el 19 de diciembre en Guanajuato, San Luis, Michoacán, Zacatecas, Querétaro, Hidalgo, Puebla, Jalisco, Durango y el Edomex.
La PGR y Pemex concentran en estos estados el 75 por ciento de los reportes de venta clandestina, principalmente gasolina y diesel, a través de los llamados huachicoleros, que son bandas organizadas que roban el combustible para venderlo.
De acuerdo con las denuncias, el precio del combustible ilegal ronda entre los 25 y los 40 pesos, y en algunos casos, indican los reportes, son los empleados de las gasolineras quienes informan a los consumidores los sitios donde pueden encontrarlo.
En el caso del centro del País, fuentes de Pemex atribuyen la escasez a tres tomas clandestinas que afectaron el ducto Salamanca-Aguascalientes, cuya operación ha sido intermitente.
Según informes oficiales de la petrolera, un "desfase de reparto" causa el desabasto que viven entidades como Aguascalientes, Zacatecas, Michoacán y Guanajuato.
En San Luis Potosí, Durango, Puebla, Jalisco, Guanajuato y Michoacán, el abastecimiento depende directamente de la red de ductos que cruza por Salamanca, los cuales son los que presentan mayor ordeña a nivel nacional por parte de huachicoleros.
En estas entidades, el precio del combustible se llega a vender hasta en 250 pesos el galón.
El comercio clandestino con combustible, obtenido de manera ilegal, se lleva a cabo a través de puntos localizados en las carreteras, en las ciudades e incluso en redes sociales, donde personas aprovechan el desabasto y ofrecen garrafas a sobreprecio llenas de carburante.
En Durango, donde en el último par de días se ha comenzado a agravar el desabasto de hidrocarburos, autoridades, organizaciones y ciudadanos han alertado un incremento sustancial de venta ilegal de combustible.
Carlos Güereca Prado, representante de la Organización Interamericana de Consejos Ciudadanos, advirtió el martes ante medios locales que en la capital del Estado se han detectado cuatro puntos, ubicados afuera de parques y fraccionamientos, en los que se vende el combustible de forma descarada y a la vista de las autoridades.
Lo anterior, expuso, además de ser un delito federal conlleva un riesgo para la seguridad de las personas.
"No únicamente es el acto ilegal que se está cometiendo, sino todo lo que está detrás de ello, desde la ordeña de ductos y el riesgo que se corre al abastecer unidades con el combustible sin las medidas necesarias", dijo.
En tanto, en redes sociales usuarios duranguenses ofrecen garrafas de dos galones de gasolina en 500 pesos.
En Jalisco se vive una situación similar, en la que, además de venderse de manera clandestina a más de 20 pesos el litro en Guadalajara, Lagos de Moreno y Ocotlán, en Facebook hay grupos en los que se venden 20 litros de gasolina por un precio que va entre los 500 y 600 pesos.
En Michoacán, ante el desabasto generalizado de gasolina, también ha proliferado el comercio negro en algunos municipios, como Sahuayo, Morelia, Jiquilpan y Zamora, donde ofertan garrafones de 20 litros en 370 pesos.
En Puebla, una de las entidades donde se presenta la mayor cantidad de huachicoleros, la Asociación Mexicana de Empresarios de Gasolineras (Amegas) denunció que hay una preferencia de los poblanos por acudir a sitios clandestinos para surtir gasolina, ubicados en lugares como Ciudad Serdán y Tepeaca.
Fuente.-
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