Luego de diez años de permanecer prófugo, la Procuraduría General de la República (PGR) detuvo al ex comandante de la extinta Agencia Federal de Investigación (AFI), Alejandro Álvarez Álvarez, por su presunta responsabilidad en el delito de secuestro.
La captura del ex mando policiaco se realizó tras un cateo realizado en un domicilio en la colonia Agrícola Oriental, delegación Iztacalco, en la Ciudad de México.
Según la investigación de la PGR, el 28 de mayo de 2006, dos personas se encontraban en un restaurante en compañía de cinco menores de edad, cuando llegaron al lugar varios vehículos, de los cuales bajaron 30 personas vestidas de civiles, entre ellos, varios elementos de la AFI, quienes los amagaron con armas de fuego y se los llevaron de ese lugar.
Los agentes de la extinta AFI exigieron a los familiares de las personas privadas de su libertad, la cantidad de un millón de pesos, con la amenaza de que si no lo hacían serían puestos a disposición del agente del Ministerio Público de la Federación con tres kilos de mariguana y dos bolsas de cocaína.
No obstante, las víctimas no pudieron reunir la cantidad y solo se entregó al Agente del Ministerio Público Federal, a dos agentes Federales de Investigación y a un Investigador de Delitos Federales, la cantidad de 130 mil pesos y la factura de un vehículo.
Por estos hechos, el comandante en jefe de la otrora Agencia Federal de Investigación, fue ingresado al Reclusorio Preventivo Norte, donde continuará su proceso penal.
Su detención derivó de un operativo de la Visitaduría General de la PGR con apoyo de elementos de la Agencia de Investigación Criminal, mismos que cumplimentaron una orden de cateo otorgada por el juez Quinto Federal Penal Especializado en Cateos, Arraigos e Intervenciones de Comunicaciones.
De abril de 2015 a marzo del presente año, la PGR consignó a 260 servidores públicos de la institución y a 20 particulares, de los cuales 76 casos tienen que ver por el delito contra la administración de la justicia; 58 por uso de documento falso; 28 por abuso de autoridad; 24 por extorsión; 19 por privación ilegal de la libertad; 16 por cohecho; 15 por usurpación de funciones; 15 por robo y 15 por fraude entre otros.
En el último año, los jueces federales han librado 145 órdenes de aprehensión, principalmente contra agentes del Ministerio Público de la Federación, de la Policía Federal Ministerial y mandos de la institución.
Por irregularidades administrativas graves, fueron removidos 185 servidores públicos, de los cuales 189 son agentes del Ministerio Público de la Federación y 36 agentes de la PFM.
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