De acuerdo a lo publicado en su portal por "Breitbart" de Texas,los agentes también detuvieron a otras 56 personas en un escondite y un intento fallido de tráfico de personas.
A última hora de la noche del jueves, los agentes de la Patrulla Fronteriza de la estación McAllen detuvieron a un grupo de 166 migrantes que se rindieron a ellos después de cruzar ilegalmente la frontera desde México, al sur de Mission. El grupo estaba formado por extranjeros de unidades familiares y niños extranjeros no acompañados, según la información obtenida de los funcionarios de la Patrulla Fronteriza del Sector del Valle del Río Grande.
Mientras examinaba a este grupo de migrantes, otro grupo de 87 migrantes se acercó a los agentes y se rindió. Este grupo también estaba formado por familias y menores no acompañados, dijeron las autoridades.
Antes de esto, los agentes de la Patrulla Fronteriza en esta área solo habían encontrado grupos de 50 o menos migrantes, informó MyRGVNews . Las expulsiones rápidas de los migrantes bajo el protocolo de protección del coronavirus del Título 42 establecido por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades disuadieron a grupos más grandes de intentar los cruces fronterizos peligrosos y aparentemente sin sentido. Ese programa, junto con otros programas de la administración Trump, puso fin de manera efectiva a "Atrapa y suelta" y reduce los cruces fronterizos ilegales hasta en un 85 por ciento, dijeron funcionarios a Breitbart Texas anteriormente.
HASTA EL TUETANO:
Los cambios en la política de la administración Biden que pusieron fin a los Protocolos de Protección al Migrante y un aparente cambio en las políticas mexicanas con respecto a las expulsiones del Título 42 parecen haber exacerbado la situación en el área del Valle del Río Grande.
El miércoles, los agentes de la Patrulla Fronteriza comenzaron a liberar a las familias de migrantes en las comunidades de McAllen y Brownsville, Texas. Los migrantes están siendo liberados en estos pueblos fronterizos sin ser examinados por COVID-19, dijeron las autoridades locales.
En respuesta, el gobernador de Texas, Greg Abbott, autorizó a los funcionarios de salud estatales a enviar 10,000 kits de prueba de COVID-19 a la ciudad de McAllen, informóBreitbart Texas .
“(Los agentes de la Patrulla Fronteriza) los estaban dejando en la estación de autobuses sin probarlos. Obviamente, eso es muy alarmante para todos nosotros en el sentido de que vienen de Centroamérica y a través de México y que sean liberados a los Estados Unidos sin hacerse la prueba de COVID es realmente inconcebible ”, dijo el senador estatal de Texas Juan“ Chuy ”Hinojosa (D- McAllen) dijo .
Los funcionarios de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. Respondieron que los agentes de la Patrulla Fronteriza nunca han sido responsables de realizar pruebas de detección de COVID-19 a los migrantes.
Una declaración de CBP explica:
CBP utiliza una combinación de personal médico contratado en el lugar y derivaciones a los sistemas de salud locales para brindar apoyo médico a las personas bajo custodia que requieren atención médica. El personal de CBP realiza inspecciones iniciales para detectar síntomas o factores de riesgo asociados con COVID-19 y consulta con el personal médico en el lugar, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. O los sistemas de salud locales, según corresponda. El personal médico en el lugar puede proporcionar una evaluación básica y un tratamiento de apoyo, pero los casos sospechosos de COVID-19 se derivan a los sistemas de salud locales para las pruebas, el diagnóstico y el tratamiento adecuados.
El viernes por la mañana, agentes que patrullaban cerca de Linn, Texas, intentaron detener un Ford F150. El conductor se negó a ceder. Mientras los agentes intentaban enviar por radio una descripción del vehículo a la policía local para pedir ayuda, el conductor se salió de la carretera y chocó contra la cerca de un ranchero. El conductor y los migrantes traficados salieron de la camioneta, dijeron las autoridades.
Una búsqueda en el área llevó a la aprehensión de "diez sujetos que fueron identificados como presentes ilegalmente en los Estados Unidos", continúa el comunicado. Los agentes no encontraron al conductor.
Un día antes, el Departamento de Policía de Roma, Texas, intentó detener un Chevrolet Malibu visto alejándose de una presunta casa de contrabando de personas. El oficial persiguió al vehículo hasta que los ocupantes salieron disparados. Los oficiales y agentes que respondieron detuvieron al conductor y a los migrantes. Una entrevista dio lugar a una redada en el presunto escondite donde se encontraron tres migrantes más.
Treinta y ocho migrantes más fueron encontrados en otra casa de contrabando de personas en el condado de Starr, Texas, el miércoles.
Entre el miércoles y el viernes, agentes del sector del Valle del Río Grande detuvieron a más de 300 migrantes solo en estos incidentes.
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