Según el expediente 1:21-mj-00240, radicado en una corte federal del Distrito de Columbia, Coronel Aispuro habría sido víctima del testigo 1 (o testigo principal), que mencionó el nombre de Emma durante el juicio, en este caso Dámaso López, que en su momento reveló cómo la ex reina de belleza ayudó a coordinar el escape del Altiplano de su marido, el 11 de julio de 2015, y tras su reaprehensión en 2016, “empezó a preparar un nuevo escape”, el cual habría sido interrumpido tras la extradición de Guzmán Loera, en enero de 2017.
Pero durante todo ese tiempo, revela la acusación, Emma Coronel fue la representante de su marido ante la cúpula del Cártel de Sinaloa, que entonces incluía a Dámaso López, Ismael el Mayo Zambada, y los Chapitos, y su labor principal consistía en transmitir mensajes entre el capo, desde de la prisión, para el resto de la cúpula del cártel.
Consciente que, al tratarse de hechos ocurridos en México, el FBI añadió a la acusación cargos por tráfico de drogas, incluyendo conspiración para importar heroína, cocaína, mariguana y metanfetaminas.
“Nadie cree que Emma está realmente involucrada en el tráfico de droga, pero igual la acusación no precisa que ella trafica, sino que ha conspirado para el tráfico de droga”, dijo un periodista que cubrió el llamado juicio del siglo, y quien solicitó no revelar su identidad.
Aún cuando el Departamento de Justicia de Estados Unidos (USDOJ) no tenga pruebas sobre su participación en el tráfico de droga, la fiscalía estadounidense se valdrá del hecho que, al Emma Coronel haber ayudado al Chapo a escapar del Altiplano en 2015, la conspiración incluye cargos por toda la droga que su esposo traficó a Estados Unidos, y en opinión de los agentes investigadores que formularon el expediente, la droga es suficiente como para enterrar a Coronel Aispuro de por vida en la cárcel.
“La pregunta es: porqué el gobierno esperó hasta ahora cuando tuvo toda esa información desde hace dos años”, se cuestionó el mismo periodista.
Entrevistado vía telefónica, el ex agente de la DEA, Mike Vigil, dijo que la esposa del Chapo se confió porque no conoce las leyes del país ni los procedimientos de las agencias que investigan el narcotráfico. Por eso se quedó en los Estados Unidos después de que su esposo fue condenado.
Dijo pensar que se trata de una acusación sólida. “Los fiscales en los Estados Unidos son muy estrictos; solo se hace una acusación cuando existen reales elementos de prueba y están seguros poder lograr una sentencia condenatoria”.
Si Estados Unidos se vale del principio de que Coronel Aispuro ayudó a su esposo a escapar, y tras la fuga el capo continuó traficando grandes cantidades de droga, Coronel Aispuro tendría poca probabilidad de salir bien librada de un juicio contra Estados Unidos, y menos si los fiscales alegan que la droga traficada a su país mató a cientos de personas en las comunidades pobres de Nueva York, DC, y Chicago, y disparó la violencia en varias partes de México.
Fuera de las acusaciones hechas por el Licenciado, a quien en el expediente lo identifican como Testigo 1, se desconoce quién más podría estar testificando contra la ex reina de belleza, y por consiguiente si realmente existen textos o grabaciones en poder del agente del FBI, Eric McGuire, que dirigió la investigación y que en su momento tendría que mostrar ante el juez Michael G. Harvey, además de precisar cómo se hicieron de ellas.
El expediente también menciona los nombres de todos los hijos del Chapo, y del Mayo Zambada, como parte medular de lo que se conoce como el Cártel de Sinaloa.
Emma Coronel será presentada ante un juez federal del Distrito de Columbia mañana martes, durante el transcurso de la mañana.
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