Este lunes, la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) dio a conocer los avances en la investigación que la Procuraduría General de la República (PGR) lleva adelante sobre la desaparición forzada de al menos 10 civiles, cometida presuntamente por elementos navales.
La Semar reveló que son 257 los marinos separados de sus unidades operativas y que desde hace casi cuatro meses están concentrados en la Ciudad de México, sometidos a investigación por parte de la PGR para esclarecer la presunta participación de algunos de ellos en las desapariciones.
En detalle, la Marina indica que se trata de 257 elementos (3 Capitanes, 24 Oficiales y 230 Clases y Marinería), “los cuales se encontraban desarrollando operaciones en Nuevo Laredo, Tamaulipas, destacamentados en las Bases de Operaciones de Nuevo Laredo, Nuevo Laredo Norte y Colombia”.
Son prácticamente dos Secciones de Infantería de Marina (130 elementos cada una) las que están bajo investigación dentro y fuera de la institución. Destaca en particular que también se investiga a integrantes de la Unidad de Operaciones Especiales (UNOPES), la fuerza élite de la Marina, encargada de llevar adelante las operaciones especiales de alto impacto en contra de objetivos precisos de la delincuencia organizada.
La UNOPES está integrada por unos 60 elementos, de los cuales la mayoría son seleccionados de entre quienes forman parte del 27° Batallón de Infantería de Marina (27BIM) con sede en la Ciudad de México. Otros integrantes son seleccionados del 29° BIM y del 24°BIM que pertenece todavía al Cuerpo de Guardias Presidenciales (CGP). Dicha unidad está subordinada al Cuartel General del Alto Mando.
El 6° Informe de Labores de la Marina indica que “la Unidad de Operaciones Especiales (UNOPES), ejecuta operaciones especiales y de alto valor estratégico, en apoyo a otros mandos de la Armada de México, autoridades civiles de los tres niveles de gobierno y las que ordene el Alto Mando, con el fin de coadyuvar en el mantenimiento del estado de derecho en cumplimiento de la misión y atribuciones de la SEMAR”.
De septiembre de 2017 a agosto de 2018, la UNOPES realizó las siguientes acciones: Adiestramiento Con el fin de incrementar las habilidades físicas y mentales del personal de Infantería de Marina, la UNOPES, capacitó en interdicción marítima, búsqueda y rescate, atención de emergencias y desastres naturales; guerra convencional, relaciones con la comunidad y guerra asimétrica (defensa contra terroristas, narcotráfico, piratería y artefactos navales no convencionales), señala el texto.
Los integrantes de a UNOPES reciben capacitación constante en los Estados Unidos, así como en Colombia y Francia.
Dicho personal se encuentra actualmente a disposición de las autoridades administrativas, ministeriales y de la CNDH, en tanto se determina la probable responsabilidad de nuestro personal, señala el comunicado.
Las denuncias sobre las desapariciones forzadas comenzaron a principio de este año, cuando el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo (CDHNL) conoció de las desapariciones de personas que habrían sido detenidos por marinos, ya sea en vehículos oficiales o en unidades civiles sin placas y cuyos tripulantes no llevaban uniforme, pero usaban equipo y distintivos navales.
Las desapariciones fueron atendidas por la Marina hasta que éstas fueron denunciadas ante el Representante de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) y se dio la intervención de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Un informe de la OACNUDDH presentado en Nuevo Laredo, Tamaulipas, señaló de manera directa a elementos de la Marina como presuntos responsables de las desapariciones forzadas y las ejecuciones denunciadas.
El pasado 3 de agosto, la CNDH emitió la Recomendación 11VG/2018 a la Marina-Armada de México por Violaciones Graves cometidas por su personal en su presunta participación en la desaparición de al menos 10 civiles ocurrida en Tamaulipas a principios de este año.
Entre los avances reportados por la Marina se señalan:
1) Los días 11 y 26 de mayo del 2018 se comunicó a la CNDH, la aceptación de las medidas cautelares dictadas, procediendo a instruirse al personal naval adscrito a la Primera Región Naval y a la Unidad de Operaciones Especiales, así como de cualquier otra unidad operativa que desarrolle operaciones en el estado de Tamaulipas, que se deberá dar cabal cumplimiento a las medidas cautelares, así mismo se supervisó se diera estricto cumplimiento a través de los Mandos Navales, quienes informan periódicamente la ejecución puntual de dichas acciones.
2) Desde el mes de mayo del año en curso, se dio vista al Órgano Interno de Control en la Secretaría de Marina, de los hechos en materia de las quejas que inició la CNDH y de los señalamientos del Representante en México de la OACNUDH, para que, de ser el caso, se inicie el procedimiento administrativo contra los servidores públicos involucrados.
3) También desde el mes de mayo pasado, se dio vista de esos hechos, los cuales pudieran ser constitutivos de delito, a la Fiscalía General de Justicia Militar a fin de que en el ámbito de sus atribuciones y facultades se les inicie el proceso respectivo.
4) Se comunicó a la Procuraduría General de la República la disposición de esta Institución para colaborar en la integración de las indagatorias que se practican con motivo de las desapariciones denunciadas, reiterándole el interés de esta dependencia del Ejecutivo Federal en que las mismas se determinen lo más pronto posible.
5) Para la práctica de diversas diligencias, se autorizó el ingreso a las diferentes Bases de Operaciones establecidas en Nuevo Laredo, a personal de la PGR y de la CNDH, quienes fueron acompañados de familiares de presuntos desaparecidos.
La Marina señala que “existe plena disposición por parte de esta Institución para contribuir al esclarecimiento de los hechos, en tanto se determina la resolución definitiva de culpabilidad o inocencia por las autoridades encargadas de impartir justicia en México”.
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