Las guerras territoriales de los carteles en Chihuahua han cobrado la vida de dos jefes de policía locales en una semana.
En uno de los ataques más recientes, el jefe de policía en Casas Grandes, Marco Antonio López Chávez, murió durante un asesinato selectivo mientras conducía su SUV por una avenida local. Un pistolero desconocido se detuvo junto a su vehículo y disparó varia veces con una pistola calibre .45, matándolo. Según la revista mexicana Proceso , López recibió múltiples amenazas de muerte antes de su asesinato.
Casas Grandes es una de las seis ciudades donde los departamentos de policía locales fueron tomados por la Oficina del Fiscal General del Estado de Chihuahua, mientras que las agencias se someten a exámenes e instrucción adicionales. Breitbart Texas habló con fuentes policiales mexicanas que revelaron que el nuevo proceso se está llevando a cabo en ciudades clave donde se rumorea que el aparato de aplicación de la ley tiene conexiones con el crimen organizado. Las seis ciudades son Casas Grandes, Nuevo Casas Grandes, Madera, Temósachi, Gómez Farías e Ignacio Zaragoza; todos vieron a numerosos oficiales despedidos, mientras que otros optaron por renunciar.
El asesinato de López Chávez sigue a Edgar Pérez de Peña, un alto comandante de la policía en la ciudad de Cuauhtémoc, Chihuahua. Como informó Breitbart Texas, Pérez de Peña recibió un disparo en la cabeza desde atrás mientras comía con su esposa en un restaurante local .
NOTA RELACIONADA:
Durante el fin de semana, en la ciudad de Guerrero, hombres armados asesinaron a dos oficiales fuera de servicio que asistieron a un funeral. Según El Diario de Chihuahua , los oficiales fueron identificados como Javier Eduardo Montes Olivas, de 45 años, y Cristian Lara Zapata, de 39 años.
Los continuos ataques a las fuerzas del orden público mexicanas parecen ser una escalada de la violencia entre los cárteles de Juárez y Sinaloa para controlar los principales territorios de tráfico de drogas y contrabando de personas. Históricamente hablando, los cárteles de la droga en México han confiado en algunos oficiales de la ley corruptos para ayudar a las operaciones. Los recientes esfuerzos del Estado para limpiar las fuerzas de seguridad y atacar las operaciones del cartel provocaron una reacción violenta por parte de los sicarios del cártel.
La ola de violencia también golpeó la ciudad fronteriza de Juárez, que está inmediatamente al sur de El Paso, Texas. En un ataque, miembros de la pandilla Barrio Azteca (parte del Cártel de Juárez) asesinaron a dos agentes de la Procuraduría General de Chihuahua y un tercero resultó herido en un ataque que se cree será una operación de prostitución dentro de una prisión estatal. Poco después, un equipo de hombres armados tendió una emboscada a dos policías municipales en Ciudad Juárez que estaban respondiendo a una llamada sobre personas sospechosas armadas fuera de un banco.
fuente.-Breitbart/TX
(Imagen/Video/Internet)
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