El Cefereso 9 de Ciudad Juárez, a donde fue trasladado Joaquín “El Chapo” Guzmán, es el peor calificado del país (6.63), pues está sobrepoblado, cuenta con deficiencias para la imposición de sanciones disciplinarias, además de falta de clasificación entre procesados y sentenciados, de acuerdo con el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2015, de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Ubicado a las afueras de la ciudad fronteriza, el penal federal ha obtenido bajas calificaciones en los últimos cuatro años que la CNDH ha realizado su diagnóstico: 6.48 en 2012, 6.11 en 2013, 5.53 en 2014 y 6.63 en 2015. El promedio nacional de penales manejados por la federación es de 7.36.
El Cefereso Número 9 Norte tiene capacidad para 848 internos y la población registrada durante el periodo de evaluación era de mil 012; la CNDH denunció que en este centro hay precarias condiciones para mantener en buen estado la salud de los internos, así como las condiciones materiales, equipamiento e higiene del área médica y de los talleres y áreas deportivas.
En su diagnóstico, le órgano garante de los derechos humanos también señaló deficiencias en el proceso para la imposición de sanciones disciplinarias, así como una “deficiente integración del expediente técnico-jurídico de cada interno”; falta de clasificación entre procesados y sentenciados; e insuficiencia en los programas para la prevención de adicciones y de desintoxicación voluntaria
De acuerdo con el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2015, el ex líder del cártel del pacífico habría sido trasladado de un penal que se mantiene en los estándares nacionales, como el del Altiplano que cuenta con 7.32 de calificación, a uno en el que hasta 2014 se habrían detectado problemas de ingobernabilidad.
Peligro de fuga
En 2009, cinco reos del Cefereso 9 escaparon durante la noche del viernes 14 de marzo. Aunque tres fueros reaprehendidos, pero el caso demostró la poca seguridad que habían en el penal.
Los fugitivos no tuvieron que cavar un túnel como lo hiciera Joaquín Guzmán para su segunda fuga en junio de 2015, pues sólo brincaron la barda del penal federal por la torre número 8, para lo que utilizaron ganchos y cuerdas.
En dicho penal se encuentra actualmente Víctor Hugo Delgado Rentería o Iván Cazarín Molina (a) “El Tanque”, segundo al mando del Cártel Jalisco Nueva Generación y quien fue detenido en noviembre de 2015.
De acuerdo con la Procuraduría General de la República (PGR), El Tanque, de 31 años de edad, operaba en las regiones del Centro, Valles y Sierra Occidental de Jalisco, así como en el Estado de Veracruz.
fuente.-LaSillaRota
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