La Fiscalía General de Justicia (FGJ) de Tamaulipas descartó un ataque armado contra el alcalde de Victoria, Eduardo Gattás Báez, en una de sus oficinas, como lo denunció en las redes sociales y ante las autoridades.
“De las primeras investigaciones se desprende que la hipótesis de una agresión directa es descartada toda vez que la escena fue modificada, aplicándose pintura en paredes y objetos donde presuntamente hubo impactos de arma de fuego, advirtiendo que fueron realizados desde hace tiempo”, informó la dependencia en un comunicado.
UNA NOVELA DE ENCONOS:
El lunes 4 de abril, Eduardo Gattás difundió un video para hacer público el supuesto atentado en las instalaciones municipales ubicadas en la plaza Pajaritos, en el fraccionamiento Pajaritos. El primer cuestionamiento fue sobre la localización real de la oficina donde despacha. El secretario general de Gobierno, Gerardo Peña Flores, calificó el hecho de “raro” y llamó a la denuncia formal.
Ayer, Gattás Báez acudió a la FGJ para presentar la documentación, por la que se abrió la carpeta de investigación. El gobierno estatal informó que una revisión del sistema de video vigilancia por la zona del supuesto ataque no se detectó nada irregular ni vehículos sospechosos.
Escena cambiada
Hoy, la Fiscalía estatal detalló que el informe de los policías investigadores y peritos arrojaron datos concretos que echan abajo la versión de Eduardo Gattás. La hipótesis oficial apunta a que los disparos no sucedieron el fin de semana como dijo el alcalde victorense.
En una primera revisión del material visual el personal especializado resolvió que el impacto de proyectil de arma de fuego en la superficie metálica, con la oxidación del metal y el desgaste de los bordes de entrada y salida, “no corresponde al tiempo de los hechos que refiere en la denuncia presentada, sino a un evento diverso pasado”, sostuvo la dependencia a cargo de Irving Barrios Mojica.
Ya en el lugar peritos definieron que “se observó que la chapa de la puerta metálica fue cambiada recientemente, teniendo a la vista en el suelo parte de esta, y la chapa anterior en su caja, en el área del marco de referida puerta”.
A través de entrevistas, los empleados de Desarrollo Municipal y Comapa de Victoria junto a vecinos de la zona contaron que aproximadamente hace un mes sí se registraron disparos en el área debido a una persecución policiaca, pero que el fin de semana no escucharon detonaciones.
Incluso, afirmó la Fiscalía, “uno de los trabajadores municipales entrevistados refirió que a finales de marzo se percató que la puerta metálica de servicio presentaba un orificio, y que esa puerta tenía más de un mes que no se utilizaba, por lo que desconoce la fecha exacta de los hechos en los que pudo suscitarse el impacto al inmueble”.
Desde ayer, el alcalde victorense consideró que desestimar su denuncia es lamentable y anticipó que buscaría llevar el caso ante la Fiscalía General de la República (FGR).
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