Desde la Cancillería aseguraron a EMEEQUIS que la renuncia de Fabián Medina a la Jefatura de la Oficina de Marcelo Ebrard fue acelerada por una queja interpuesta en el Órgano Interno de Control (OIC) de la dependencia, en el que se acusa que directores, cónsules y titulares de subsecretarías ayudaron a inscribir a sus cercanos a los ensayos clínicos de Fase 3 de las vacunas en México.
Esta investigación interna, bajo el expediente 2021/SRE/DE4, enfrentó a Fabián Medina con Roberto Velasco, director general para América del Norte de la SRE, debido a que el primero habría exigido una inspección exhaustiva ante la gravedad de las acusaciones.
Tras semanas de tironeos, el grupo identificado como cercano a Roberto Velasco ganó la partida y la resolución del Área de Quejas, Denuncias e Investigaciones de la dependencia exoneró a altos funcionarios de la SRE de haber usado su influencia para manipular las listas de voluntarios de la vacuna en su etapa más segura.
“No se encontraron elementos que demuestren de forma probable la comisión de alguna conducta constitutiva de falta administrativa en términos de la Ley General de Responsabilidades Administrativas por parte de servidores públicos adscritos a la Secretaría de Relaciones Exteriores”, concluyó la investigación de la dependencia, firmada por la servidora pública Laura Patricia Vivaldo, con folio 113-0142/2021.
Ese enfrentamiento sería el último de una larga historia de desencuentros entre ellos, avivados por las presiones presidenciales de importar vacunas contra el Covid-19 a un ritmo acelerado y sin influyentismo.
LA PRESUNTA VACUNACIÓN VIP EN SRE
EMEEQUIS obtuvo una copia de la queja en la OIC que cimbró a lo alto de la Cancillería mexicana.
Los denunciantes acusan que Martha Delgado, subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos en la SRE, y Javier Jileta, exdirector general de Vinculación con las Organizaciones de la Sociedad Civil, habrían acordado con Annette Ortiz Austin, representante de CanSino Biologics en México, que sus amigos y familiares tuvieran preferencia en el ensayo clínico en su Fase 3 en México.
El antígeno habría sido inyectado a la “plana VIP” en un edificio ubicado en la calle Ciruelo 19, colonia Ciudad Jardín, alcaldía Coyoacán, al sur de la Ciudad de México, durante los meses de noviembre y diciembre del año pasado.
Entre los beneficiados estarían la propia Martha Delgado, Javier Jileta, Cristopher Ballinas Valdés –director general de Derechos Humanos de la SRE– y otros 17 altos funcionarios cercanos al canciller Marcelo Ebrard, todos identificados como amigos de Roberto Velasco.
Cuando Fabián Medina quiso protestar por la vacunación anticipada –según las fuentes consultadas–, el director general para América del Norte usó su influencia sobre Marcelo Ebrard para callar cualquier otra protesta.
Consultado sobre esta versión por EMEEQUIS, Roberto Velasco respondió a través de un mensaje de Whatsapp: “Desconozco el motivo de su salida. No tengo nada que agregar”.
Roberto Velasco, actualmente director para América del Norte, con el canciller Marcelo Ebrard. Foto: Graciela López / Cuartoscuro.com.
LEER LA CARTA ENTRE LÍNEAS
Fabián Medina decidió abandonar el barco y, a través de su cuenta de Twitter, comunicó su renuncia al cargo; por un lado, agradeció a su “querido Marcelo” y, por otro, deslizó la posibilidad de que había una “situación” en la Cancillería con la que estaba en desacuerdo.
“Ante la situación actual de la Cancillería, me permito presentar mi renuncia con carácter de irrevocable a la Jefatura de Oficina que me conferiste desde el 1 de diciembre de 2018.
“Deseo de corazón que sigas teniendo éxito y que mires siempre por el bien de nuestro amado México”, redactó Fabián Medina.
Las clave de la carta de renuncia están en la redacción: Fabián Medina no extendió sus buenos deseos al equipo del canciller, sino que los dirigió exclusivamente a Marcelo Ebrard.
“No me sorprende mucho (la renuncia de Fabián Medina) porque hay mucha grilla al interior de Cancillería. Con quien hables, de cualquiera de las Subsecretarías, te puede decir que hay muchísimo recelo entre unos y otros, digamos, entre los diferentes bandos, sobre todo entre Roberto y Fabián”, aseguró una de las fuentes.
NI UN “HASTA LUEGO” DE LOS ENEMIGOS
El disgusto entre ambos fue de tal tamaño que la cuenta oficial de la Cancillería, @SRE_mx, tardó tres horas en confirmar su renuncia, pero sin agradecerle su labor en torno a la importación de vacunas contra el Covid-19.
“Agradecemos y reconocemos su destacada labor en la institución, principalmente en el tema del combate al tráfico de armas. Le deseamos mucho éxito en sus nuevos proyectos”, se lee en el escueto tuit de la dependencia.
Fabián Medina (@gfabianmedina), quien renunció a la Jefatura de Oficina de Marcelo Ebrard, mandó “indirecta” en Twitter tras el “reconocimiento” de ayer de la Cancillería. “Fuimos mucho más que solo Armas". Y enlistó sus logros.
Fabián Medina contestó con "indirecta" el escueto agradecimiento de la Cancillería. Enlistó sus logros.
Roberto Velasco ni siquiera le dedicó un tuit. Un día después de la salida de Fabián Medina no publicó una palabra de aliento ni de buenos deseos a su viejo compañero de trabajo.
El mismo silencio provino de la subsecretaria Martha Delgado, acusada de vacunarse anticipadamente por los “fabianistas”: ni siquiera un “hasta pronto” en Twitter al exjefe de la Oficina más poderosa de la Cancillería.
EL VIEJO AMIGO CONTRA EL JOVEN MARAVILLA
Fabián Medina había sido un veterano colaborador y es un amigo cercanísimo de Marcelo Ebrard. Se volvieron muy unidos desde que el primero fue vocero de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal y el segundo fue jefe de la policía en la administración de López Obrador.
A partir de ahí, Fabián Medina no se separó de su mentor político e, incluso, fue fundador de la corriente Movimiento Progresista, a iniciativa del sociólogo René Cervera, cuya misión era llevar a Marcelo Ebrard a la Presidencia de la República en el 2012.
Por otro lado, Roberto Velasco es considerado “el joven maravilla de la SRE”, un abogado treintañero que escaló rápidamente en la confianza de Marcelo Ebrard y que pasó de vocero a hombre clave en la relación de México con los presidentes estadounidenses Donald Trump y, ahora, Joe Biden.
Fabián Medina era el jefe de la Oficina de Marcelo Ebrard. Foto: @gfabianmedina.
“En el fondo, la disputa entre ambos era un asunto de celos. Ambos ven a Marcelo como su padre político y querían ganar influencia. Uno es el hijo que muchos años fue el favorito y el otro es el hijo nuevo que recibe toda la atención.
“Esta es la forma de Fabián Medina de distanciarse de lo que cree que podría estallar pronto en el gobierno: los malos manejos de las vacunas en Relaciones Exteriores”, asegura la fuente consultada.
@oscabalmen/
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