Con militares, policías y marinos encabezados por su jefe máximo, es decir, el presidente en turno desde López Mateos, Díaz Ordaz, Echeverría, López Portillo, De La Madrid, ¡Salinas!, Zedillo, Fox, Calderón y Peña, nuestro país está sometido a una guerra golpista, cuyo huevo de la serpiente puede parir otro Victoriano Huerta.
El periodismo de investigación de Francisco Cruz, Miguel Ángel Alvarado y Félix Santana Ángeles, nos muestra los hechos –y las interpretaciones de esos tres periodistas-investigadores– que detonaron Ayotzinapa; y que ha sido el pretexto de la clase gobernante y capitalista-empresarial para sitiar a la nación en una guerra golpista.
Son 14 capítulos sobre cómo desde 1958 se fue gestando esa guerra que parece llevarnos al callejón con la única salida del golpe de Estado. Y que sin ningún Madero a la vista, ronde Los Pinos y el Palacio Nacional el fantasma de Victoriano Huerta abortado del huevo de la serpiente golpista, incubado en el neoliberalismo económico que parió al Pinochet de Milton Friedman; éste la mano visible de que los mercados, libres de las intervenciones keynesianas, decidan el destino del pueblo mexicano, incluso el “tratar a opositores como criminales” enterrándolos en fosas clandestinas. Y permitir que feminicidios, secuestros, desapariciones forzadas y narcotráfico, colaboren con el presidencialismo para controlar, a sangre y fuego, al pueblo.
II. La guerra que nos ocultan ha estado saliendo a la luz del día con los hechos vomitados tras la desaparición de los estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa. Ese hecho ha venido siendo el centro de gravedad de lo que ha sucedido desde 1958. Y el relato de todo ese dramático más de medio siglo está en este libro de Alvarado, Santana y Cruz, quienes siguen el hilo conductor del homicidio de uno de los estudiantes bárbaramente ultimado. Y es que la historia que inicia el capítulo uno: Julio César (Mondragón Fontes), crónica de un suplicio, nos va detallando la guerra, cada vez menos oculta que se viene desatando desde hace 10 sexenios, con la mira de que la impunidad prevalezca sobre un deslinde de responsabilidades penales y constitucionales; al menos, de Peña y sus antecesores sobrevivientes, empezando por Calderón, siguiendo por Salinas y sin dejar al margen a Zedillo, Fox y Echeverría.
III. Es un libro tras las huellas del militarismo-policiaco del presidencialismo nacido de la contrarrevolución en 1946, cuando el ascenso de Miguel Alemán que impuso como sucesor al tramposo-mañoso de Ruíz Cortines y éste a López Mateos con quien se inicia, propiamente dicho, esa guerra de las élites económica-plutocrática y la élite política-oligárquica, quienes han tropezado con Ayotzinapa. Y como pocas veces en nuestra sociedad, la resistencia de todo lo que representan esos 43. Drogas, minerales (titanio y uranio), en un Guerrero como centro de operación de los narcos, los gobernantes, los empresarios, los militares. Y un presidencialismo que se lleva su parte y manipula una dizque lucha contra la inseguridad, con medio típicos de una guerra contra el pueblo. El texto es una puntual investigación del porqué no resuelven los conflictos cuyo factor común es Ayotzinapa, en aras de complicidades de la manu militari y la mano invisible de politiquillos rateros con los narcos, empresarios, banqueros. Y un presidencialismo que ya topó con la pared de los derechos humanos, y sobre todo la resistencia popular que por todo el país aparece para enfrentar con sus revueltas, la guerra encubierta con la simulación de un combate a la inseguridad.
Autores: Francisco Cruz, Félix Santana Ángeles y Miguel Alvarado
Título: La guerra que nos ocultan
Fuente.-Álvaro Cepeda Neri
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