Sanjuana Martínez es una aguerrida periodista regiomontana, a quien el presidente Andrés Manuel López Obrador le confió la dirección de Notimex, la agencia de noticias gubernamental.
A lo largo de cinco años, la periodista galardonada con múltiples premios nacionales e internacionales intentó sacudir la polilla en la vetusta agencia informativa, pero se topó con la pared de los intereses que durante años la controlaron.
Pero los que se sintieron amenazados por la reestructuración, trabajadores sindicalizados en su mayoría, lograron enfrentar a Sanjuana Martínez gracias a que tenían el apoyo de su dirigente sindical, Arturo Alcalde Justiniani.
Don Arturo no era cualquier líder. Era nada menos que un abogado laborista que controlaba los sindicatos de Nafinsa, Banobras, el de pilotos aviadores, entre otros. Además, es integrante de una de las familias con mayor influencia en Morena. Su esposa, Bertha Luján Uranga, fue contralora del gobierno capitalino de López Obrador, además de Secretaria General y Presidenta de Morena.
Eso fue lo que le permitió a su hija, Luis María Alcalde, alcanzar a los 32 años la Secretaría del Trabajo, y a los 35, la Secretaría de Gobernación, cargo que aún detenta.
Pero ahí tienen que, frente a las confrontaciones entre Sanjuana Martínez y el sindicato de Notimex, el gobierno decidió cerrar la agencia. Y el padre de la ahora Secretaria de Gobernación fue el encargado de disponer de las liquidaciones.
A los 34 trabajadores que serían originalmente liquidados, les sumaron 53 “cachirules”, personas sin merecimientos, lo que llevó a totalizar una liquidación de esos 87 trabajadores por un monto de 256 millones de pesos.
Pero resulta que a los 63 trabajadores que estaban del lado de la directora Sanjuana Martínez les ofrecieron 150 millones de pesos de liquidación, pero con una condición. Que dejaran en la mesa 30 millones de pesos como aportación para la campaña presidencial de la morenista Claudia Sheinbaum. Como no aceptaron, les redujeron la liquidación total de 150 millones de pesos a solo 15 millones.
Sanjuana Martínez es una periodista de armas tomar. De carácter firme y sin tapujos; controvertida, pero de condición honesta, la ex directora de Notimex salió a denunciar el chantaje, la extorsión. Y en un artículo publicado en el diario La Jornada, dijo que en la petición de los dineros para la campaña de Sheinbaum participaron Marath Bolaños, quien sustituyó a Luisa María Alcalde en la Secretaría del Trabajo y su responsable jurídico José Luis Sánchez Cuazitl.
Salvo que existan pruebas que evidentemente liguen la extorsión a la campaña presidencial morenista, será difícil acusar a Claudia Sheinbaum de andar pidiendo diezmos. Sin duda, decenas de funcionarios están hoy pasando la charola, recolectando decenas de millones de pesos, sin que ella lo sepa.
Pero lo que sí es un hecho es que, lo sucedido con las liquidaciones de Notimex, dejan al descubierto un acto de extorsión en el que se ven involucrados personajes muy cercanos a los afectos del presidente López Obrador y de sus hijos, como lo son la Secretaria de Gobernación, su padre y el Secretario del Trabajo. Y eso da mucho de qué hablar.
La denuncia no es menor, sobre todo, cuando aquí no están en juego acusaciones de adversarios, fifís o conservadores. Es una disputa de Morena contra Morena, en una muestra de lo que veremos -y en abundancia-, en los próximos meses. ¿A quién acusará aquí el presidente? ¿A quién le salvará la cara?.
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