En 2016, Grecia Reynoso y Pablo Espinosa empezaron el desarrollo de una app que pudiera ayudar a las personas a mejorar su salud mental y emocional. La plataforma, de nombre Jenny, quedó terminada en 2019. Desde entonces, cuenta con más de 30 mil usuarios. Una cifra que, de acuerdo con sus creadores, ha ido en aumento durante esta cuarentena por COVID-19.
Disponible en Android, iOS y web (https://jenny.com.ai/), Jenny es producto de la unión entre los campos de la psicología y la tecnología. Utiliza Inteligencia Artificial para detectar y medir en tiempo real problemas mentales o emocionales, así como para recomendar soluciones personalizadas basadas en el diagnóstico.
Funciona como un chatbot, es decir, como una especie de chat, en el que Jenny comienza a hacer preguntas al usuario para comenzar el diagnóstico. Programada bajo la metodología cognitivo-conductual, aborda temas como el bullyin, el acoso sexual, estrés, ansiedad, bulimia, anorexia, adicciones y suicidio.
“Buscamos ayudar a la mayor cantidad de personas posible, porque en México es difícil acceder a apoyo psicológico. Hay muchas barreras: desde el costo, el miedo, la pena. Esta aplicación ayuda a romper esas barreras: las personas saben que nadie las va a juzgar, nadie las va a ver, lo pueden hacer desde su casa, desde su teléfono, rápido y fácil; es una entrada a la salud mental y emocional”, comenta Reynoso en entrevista.
Sobre el nombre de la aplicación, Espinosa explica que decidieron llamarla así porque Jenny es un nombre femenino que puede empatizar mucho con las personas. “En el formato, en los flujos conversacionales, hemos buscado que tenga una personalidad cálida y amistosa con los usuarios. Que sientan como si estuvieran hablando con una mujer muy sabia”, dice.
El diagnóstico, afirma, es cien por ciento confidencial: solo el usuario tiene acceso a esa información. “Con base en él –añade–, Jenny genera la data de lo que cada quien necesita. Y puede canalizar a los usuarios con uno de los especialistas de nuestra de red nacional terapéutica, formada por psicólogos con diferentes metodologías: psicoanálisis, junguiana, conductual; tanatólogos, nutriólogos y médicos generales”.
Además, la aplicación cuenta con un área llamada "contención de crisis", que consiste en un botón de ayuda que permite al usuario saltarse todos los procesos y los protocolos del chat para contactar con un especialista. Funciona en casos de afectación mental como ataques de pánico e incluso ideas suicidas.
Tecnología mexicana
“Somos una tecnología cien por ciento mexicana. Todo lo desarrollamos nosotros”, comenta Espinosa. Reynoso añade que la creación de Jenny fue posible gracias a un fondeo privado.
Jenny nació como una herramienta de psicología organizacional para ayudar a las empresas a mejorar la productividad laboral de sus empleados y a mejorar el clima laboral. Por lo que una parte de sus clientes y aliados son organizaciones.
No obstante, cualquier persona interesada puede tener acceso a la aplicación. Hasta antes de la contingencia sanitaria por coronavirus, era necesario pagar por el servicio, pero a raíz de la cuarentena, los creadores decidieron dar acceso gratuito a Jenny. Desarrollaron, además, un módulo dedicado a COVID-19.
Este apartado, explica Reynoso, incluye información general sobre qué es el coronavirus, cómo se transmite, cuáles son los síntomas, cómo evitar el contagio y la propagación, así como un cuestionario de evaluación de riesgo de contagio, que utiliza la misma escala que el gobierno federal. Además, cuenta con recomendaciones generales y de bienestar emocional. Los temas que aborda son estrés, ansiedad, resiliencia y empatía.
“Diario, Jenny te va a hablar de algo diferente relacionado con las emociones que puedes estar experimentando en torno a la contingencia y el aislamiento. Te va a dar ejercicios para ayudarte a manejar esas emociones y a sentirte mejor. Todas son herramientas hechas por nuestro equipo de psicólogos”, comenta.
“Tenemos muchos registros en la noche, en la madrugada. Lo que nos permite saber que la gente no está tranquila: tiene insomnio, que es un síntoma de la ansiedad. El duelo es otro de los temas que tocamos. Al final, todos estamos pasando por un duelo, todos perdimos algo: libertad la cercanía con tu familia o a la mejor un trabajo”, añade.
El sistema analiza las conversaciones de los usuarios y, con base en ello, arroja una gráfica de los estados de ánimo que registran. Esto ha permitido a los creadores de Jenny observar un aumento en el estado de ánimo negativo en los meses de marzo y abril, es decir, durante la cuarentena por coronavirus.
“En estos momentos es muy importante tener una buena salud mental. No solamente están los problemas que pueden presentarse en la mente sino también la somatización, sin contar las afectaciones que puedes tener en un tu círculo cercano”, comenta Espinosa.
“Con todo esto, estamos generando convenios más grandes, más usuarios. Sin hacer ningún tipo de promoción, estamos recibiendo 300 o 400 usuarios nuevos al día. También estamos recibiendo llamadas. La gente está agendando citas con los psicólogos. Y hemos recibido contenciones de crisis”, asegura.
Con el acceso gratuito a la aplicación, así como con la inclusión y la actualización del módulo de COVID-19, es que Grecia Reynoso y Pablo Espinosa esperan ayudar a las personas que presentan algún problema psicológico o emocional en esta cuarentena.
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