En tono sarcástico y jocoso, la periodista Denise Dresser escribe en su columna de hoy para el periódico El Norte lo que titula "Mandamientos",de cuya lectura que no tiene desperdicio,se puede dibujar y desdibujar con claridad a Andres Manuel Lopez Obrador,al Presidente y la institución presidencial que parece ser "ya no son una misma cosa".
1) Amarás a Andrés Manuel López Obrador por encima de todas las cosas. Harás tuyas todas las palabras que pronuncie en sus conferencias matutinas, y las usarás para justificar el pensamiento único, irreprochable. El Presidente será el depositario de la sabiduría y promotor de una sola visión correcta del País y sus problemas. La obediencia absoluta y la rendición intelectual ante la incongruencia son el signo de los nuevos (viejos) tiempos.
2) No tomarás el nombre de tu Dios en vano y lo utilizarás para justificar la violación sistemática a la ley. Otorgarás un perdón anticipado a los saqueadores del peñanietismo u ofrecerás que su destino sea decidido vía una consulta popular. Comenzarás el proceso de reclutamiento para una Guardia Nacional que aún no ha sido aprobada. Modificarás la Constitución a conveniencia y emprenderás programas sociales sin reglas de operación, poniendo el clientelismo prianista al servicio de la causa morenista para formar una base sólida de seguidores.
3) Santificarás las fiestas como la consulta a la Madre Tierra para verificar su aprobación al Tren Maya, y procederás a su construcción sin estudios de viabilidad técnica, costo-beneficio o impacto ambiental.
4) Honrarás a tu padre y a tu madre (Juárez, Madero, Cárdenas), pero harás una interpretación selectiva de la historia, olvidándote del liberalismo juarista, el compromiso democrático de Madero, el impulso institucionalista de Cárdenas, la subordinación del poder civil al poder militar promovida por todos los Gobiernos posrevolucionarios. Desconocerás los procesos y las instituciones fundacionales que permitieron la democratización gracias a la cual llegaste al poder. En lugar de diagnosticar y corregir los defectos del INE, el INAI, la CNDH, la CRE, la ASF y la Cofece, te dedicarás a denostarlos y a ahorcarlos presupuestalmente para que no puedan llevar a cabo su labor.
5) No matarás, pero atacarás a cualquier crítico. Rebajarás al "otro", al que no piensa como tú, a la categoría de adversario inmoral. No rebatirás las críticas en función de los argumentos sino en función de la supuesta identidad de quien los presenta: el fifí, el derechario, el neofascista, el canalla, el chayotero, el elitista, el medio vendido. Interpretarás cualquier cuestionamiento -por válido por sea- como resultado de personas empeñadas en mantener sus privilegios. Creerás que sólo tu grupo representa los intereses legítimos de la nación, y cualquiera que se oponga es un traidor neoliberal. Descalificarás a la sociedad civil, argumentando que sus miembros no alzaron la voz ante la violencia peñista y calderonista, cuando muchas organizaciones de izquierda lo hicieron consistentemente.
6) No cometerás actos impuros como fortalecer los contrapesos, garantizar la transparencia, asegurar la rendición de cuentas, impulsar la construcción de ciudadanía. Dirás que la "democracia participativa" es más legítima aunque esté basada en consultas populares sesgadas, poco representativas y metodológicamente indefendibles. Insistirás en que respetas la división de poderes pero nombrarás a tu propio Fiscal Carnal e irás colonizando al aparato estatal con funcionarios poco competentes pero leales.
7) No robarás excepto cuando sea necesario despedir a personal del SAT, el IMSS, el ISSSTE y la Secretaría de la Función Pública sin otorgarle la indemnización obligada por la ley.
8) No dirás falso testimonio ni mentirás pero sí permitirás que miembros de tu equipo lo hagan, como en el caso de Javier Jiménez Espriú, quien ha avalado el aeropuerto de Santa Lucía con la lógica de que los aviones "se repelen" o que los costos de cancelación del NAIM no serán sufragados por los constituyentes.
9) No consentirás pensamientos ni deseos impuros de quienes buscan que la política pública esté basada en datos y evidencia, en vez de improvisación y ocurrencia.
10) No codiciarás los bienes ajenos que monopolistas y rentistas como Ricardo Salinas Pliego se han apropiado, expoliando a consumidores mexicanos durante décadas y no intentarás atajarlos vía más impuestos y mejor regulación. Como no eres una persona vengativa, perdonarás a los miembros de la élite corrupta, les ofrecerás nuevos contratos y los incorporarás a la Cuarta Transformación en la que habrá un capitalismo de cuates con nuevos cuates; los tuyos.
Amén.
Fuente.-opinion@elnorte.com/Denise Dresser/
2) No tomarás el nombre de tu Dios en vano y lo utilizarás para justificar la violación sistemática a la ley. Otorgarás un perdón anticipado a los saqueadores del peñanietismo u ofrecerás que su destino sea decidido vía una consulta popular. Comenzarás el proceso de reclutamiento para una Guardia Nacional que aún no ha sido aprobada. Modificarás la Constitución a conveniencia y emprenderás programas sociales sin reglas de operación, poniendo el clientelismo prianista al servicio de la causa morenista para formar una base sólida de seguidores.
3) Santificarás las fiestas como la consulta a la Madre Tierra para verificar su aprobación al Tren Maya, y procederás a su construcción sin estudios de viabilidad técnica, costo-beneficio o impacto ambiental.
4) Honrarás a tu padre y a tu madre (Juárez, Madero, Cárdenas), pero harás una interpretación selectiva de la historia, olvidándote del liberalismo juarista, el compromiso democrático de Madero, el impulso institucionalista de Cárdenas, la subordinación del poder civil al poder militar promovida por todos los Gobiernos posrevolucionarios. Desconocerás los procesos y las instituciones fundacionales que permitieron la democratización gracias a la cual llegaste al poder. En lugar de diagnosticar y corregir los defectos del INE, el INAI, la CNDH, la CRE, la ASF y la Cofece, te dedicarás a denostarlos y a ahorcarlos presupuestalmente para que no puedan llevar a cabo su labor.
5) No matarás, pero atacarás a cualquier crítico. Rebajarás al "otro", al que no piensa como tú, a la categoría de adversario inmoral. No rebatirás las críticas en función de los argumentos sino en función de la supuesta identidad de quien los presenta: el fifí, el derechario, el neofascista, el canalla, el chayotero, el elitista, el medio vendido. Interpretarás cualquier cuestionamiento -por válido por sea- como resultado de personas empeñadas en mantener sus privilegios. Creerás que sólo tu grupo representa los intereses legítimos de la nación, y cualquiera que se oponga es un traidor neoliberal. Descalificarás a la sociedad civil, argumentando que sus miembros no alzaron la voz ante la violencia peñista y calderonista, cuando muchas organizaciones de izquierda lo hicieron consistentemente.
6) No cometerás actos impuros como fortalecer los contrapesos, garantizar la transparencia, asegurar la rendición de cuentas, impulsar la construcción de ciudadanía. Dirás que la "democracia participativa" es más legítima aunque esté basada en consultas populares sesgadas, poco representativas y metodológicamente indefendibles. Insistirás en que respetas la división de poderes pero nombrarás a tu propio Fiscal Carnal e irás colonizando al aparato estatal con funcionarios poco competentes pero leales.
7) No robarás excepto cuando sea necesario despedir a personal del SAT, el IMSS, el ISSSTE y la Secretaría de la Función Pública sin otorgarle la indemnización obligada por la ley.
8) No dirás falso testimonio ni mentirás pero sí permitirás que miembros de tu equipo lo hagan, como en el caso de Javier Jiménez Espriú, quien ha avalado el aeropuerto de Santa Lucía con la lógica de que los aviones "se repelen" o que los costos de cancelación del NAIM no serán sufragados por los constituyentes.
9) No consentirás pensamientos ni deseos impuros de quienes buscan que la política pública esté basada en datos y evidencia, en vez de improvisación y ocurrencia.
10) No codiciarás los bienes ajenos que monopolistas y rentistas como Ricardo Salinas Pliego se han apropiado, expoliando a consumidores mexicanos durante décadas y no intentarás atajarlos vía más impuestos y mejor regulación. Como no eres una persona vengativa, perdonarás a los miembros de la élite corrupta, les ofrecerás nuevos contratos y los incorporarás a la Cuarta Transformación en la que habrá un capitalismo de cuates con nuevos cuates; los tuyos.
Amén.
Fuente.-opinion@elnorte.com/Denise Dresser/
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Tu Comentario es VALIOSO: