Audomaro Martínez goza de la total confianza de López Obrador. El virtual próximo secretario de Defensa estuvo siempre cerca del General Juan Arévalo Gardoqui, en la administración de Miguel de la Madrid. En el 2001, a su arribo al gobierno de AMLO al gobierno del Distrito Federal, fue propuesto como jefe de su seguridad y en 2006, se incorporó a su campaña presidencial, donde perdió ante Calderón.
Aunque se encuentra en retiro no está imposibilitado para ocupar la posición de secretario de Estado, aunque esto debe ser negociado con los grupos de alto rango dentro de la milicia a fin establecer pesos y contrapesos en el sector. Además, Martínez Zepeda es apreciado en el medio castrense por su disciplina e institucionalidad, a pesar de que le pidieron su jubilación mientras era general brigadier. Tendrá 70 años de edad al momento en que ser nombrado general de división (de cuatro estrellas) y secretario de Defensa, a partir del 1 de diciembre.
López Obrador le tiene tanta confianza como para dejar su seguridad en manos del militar de caballería, especialista en tanques de guerra.
Por lo que respecta a Solano, el año pasado fue ascendido a almirante y fueron retirados luego de cumplir 4 décadas de servicio en la institución. Fue comandante de la base naval de Veracruz en el 2015, donde apoyó a las fuerzas civiles en la guerra contra el crimen. También goza del reconocimiento de los marinos en todo el país.
Ambos tendrán, cuando menos en los primeros 3 años del gobierno de AMLO, la responsabilidad de la seguridad nacional y especialmente las estrategias marcadas desde Palacio Nacional para enfrentar al crimen organizado, de la mano del Alfonso Durazo.
AMLO tendrá que cumplir con varios requisitos en materia legislativa, que podría proponer a través de la fracción parlamentaria de Morena a partir del 1 de septiembre.
fuente.@Vsanchezbanos/(Imagens/Web)
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