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El papa Francisco señaló en una entrevista con Notimex que los mexicanos “están viviendo su pedacito de ‘guerra’, entre comillas, de sufrimiento, de violencia, de tráfico organizado”.
Francisco apuntó que “el México de la violencia, de la corrupción, del tráfico de drogas, de los cárteles no es el México que quiere” la virgen de Guadalupe.
Sin embargo, aclaró que no viene al país “como un rey mago cargado de cosas para llevar mensajes, ideas o soluciones a problemas”, sino que “voy como peregrino, a buscar en el pueblo mexicano que me den algo. No voy a pasar la canastita, quédense tranquilos, pero voy a buscar la riqueza de fe”.
Respecto a qué relación tiene el viaje pastoral con la situación que se vive en el país, destacó que “si yo voy ahí, es para rezar con ustedes, para que los problemas de violencia, de corrupción y todo lo que ustedes saben que está sucediendo, se solucionen”.
Por ello, el pontífice exhortó a los mexicanos a luchar contra el crimen organizado y la corrupción, y los instó a usar el diálogo para alcanzar la paz. No obstante, acotó que no viene a dialogar con los delincuentes, pero sí “con las personas que pueden tocar su corazón”.
Francisco resaltó que “aunque suene un poco contradictorio, la paz hay que pelearla todos los días”.
“Nos da la razón”
Sobre las declaraciones del papa, la Arquidiócesis de México aseguró que reconoció que “la situación de inseguridad en México equivale a una guerra, por lo que hizo un llamado a no tapar, sino a denunciar la corrupción y la violencia generada por el narcotráfico en el país”, por lo que aseguró, el papa le “da la razón a lo publicado en el semanario Desde la fe”.
El semanario, destacó la arquidiócesis en su portal informativo, ha “denunciado sin ambages los distintos problemas que sufre el país, entre ellos, los ocasionados por la presencia del crimen organizado en algunos puntos del territorio nacional, incluido el estado de Michoacán que visitará Francisco el próximo 16 de febrero”.
Recientemente el arzobispo de Morelia, el cardenal Alberto Suárez Inda, calificó de “amarillista” y “exagerado” el texto del semanarioDesde la fe, que en su editorial titulado “Queremos paz”, publicado el pasado 31 de enero, recordó que en lo que va de enero han ocurrido 52 muertes violentas, y en tres meses, 290 homicidios dolosos en Michoacán.
“Esta dramática realidad no ha sido reconocida, sino más bien criticada por algunos sectores que se niegan a aceptar que México sufre una de las peores crisis de violencia en su historia. Y es que, la verdad no peca, pero incomoda”.
Sin negar el problema
Respecto a la publicación del semanario, en entrevista con Joaquín López-Dóriga, Suárez Inda aclaró: “Todo México tiene violencia y pobreza, pero Michoacán tiene su dignidad; creo que el papa no viene a señalar problemas, sino a darnos ánimo a todos”.
El arzobispo de Morelia señaló que, sin negar que hay problemas, “Michoacán es emblemático también por sus valores, su cultura, su historia, no es para estigmatizar, es para animar y para darnos a nosotros impulso, porque tenemos capacidad de seguir adelante, y no está peor que Oaxaca, que Chiapas, que Nuevo León o que Tamaulipas”.
En el mismo sentido, Humberto Roque Villanueva, subsecretario de Población, Migración y asuntos religiosos de la Secretaría de Gobernación, comentó ayer en entrevista con Adela Micha que “para nada se trata de ocultar debajo del tapete estas cosas”.
Sobre el texto de la arquidiócesis destacó: “Yo quise irme a una reflexión más allá de decir si (lo) aceptábamos o si lo veíamos exagerado... El asunto de la seguridad pública es un tema que debemos compartir todos, sociedad, Estado, Iglesia, etc.”
Roque Villanueva opinó que “las iglesias —aquí hablo en plural aunque estaba refiriéndome a la católica— ayudarían mucho formando moralmente a mucha de la gente que lamentablemente cae en la criminalidad”.
Legisladores aplauden declaración papal
Diputados de PRD, PAN y Morena coincidieron en que deben atenderse los señalamientos del papa y consideraron que nadie debe sentirse agraviado.
Xavier Nava, vocero de la bancada del PRD, dijo que lo referido por Francisco es "un diagnóstico de la realidad mexicana y no es un secreto para nadie" y que "la opinión del líder religioso es bienvenida".
El vocero de la bancada del PAN, Jorge López Martín, dijo que lo que señaló el papa "es importante de atenderse, de escucharse en los términos de lo que significa un líder como él", además de que "nadie se debe ofender, porque lo hace en un ámbito de libertad de expresión y en un sentido de responsabilidad".
El vicecoordinador panista, Federico Döring, dijo que es normal que el pontífice "ponga el dedo en la llaga y que critique la desigualdad, con tantos millones de pobres teniendo al hombre que por muchos años fue el más rico, y por otro, el país que generó al narcotraficante más buscado del mundo".
El presidente de la Comisión de Transparencia y Anticorrupción, Rogerio Castro, de Morena, dijo coincidir con el pontífice porque "sin duda en México estamos viviendo un problema muy grande. Él se da cuenta, lo sabe y creo que su opinión es la opinión del mundo, ya vieron que hace poco salió un estudio donde dice que México está en los últimos lugares de combate a la corrupción"
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