La zona de Doctor Coss, Nuevo León, y la región ribereña de Tamaulipas (Miguel Alemán, Camargo, entre otros) atraviesan una nueva ola de violencia marcada por enfrentamientos entre células del Cártel del Noreste (CDN), el Cártel del Golfo (CDG), y choques directos de estos grupos con fuerzas estatales y federales como la Guardia Nacional (GN) y Fuerza Civil de Nuevo León, como desde hace mas de 14 años.
La violencia en la región no es nueva y responde a la sempiterna disputa entre facciones del CDG que encabeza Cesar y Alvaro Noe Morfin Morfin,alias “Primito y El R8” de y la faccion de Zetas del CDN con matriz en Nuevo Laredo.
Los ataques armados, quema de vehículos y hallazgos de cuerpos con signos de violencia extrema se han vuelto nuevamente frecuentes, como lo documenta la prensa nacional y local en los últimos meses.
Contexto criminal: guerra entre CDN y CDG
En municipios fronterizos como Miguel Alemán y Camargo, los enfrentamientos entre el CDN y el CDG han dejado múltiples muertos y una estela de terror en la población.
Respuesta oficial: discursos y reuniones de gobernadores
Ante la misma escalada de violencia de siempre, los gobernadores de Nuevo León,Samuel García,de Tamaulipas Americo Villarreal y Manolo Jimenez de Coahuila,se volvieron a reunir para volver a tratar los objetivos incumplidos de todas las reuniones que han sostenido.
Que dice el mentiroso mañoso-compulsivo de Tamaulipas:
El discurso oficial: entre el optimismo y la negación de la realidad
El gobernador multimanchado de “huachicol” que huele a crimen organizado, afirma que, gracias al “diálogo y la coordinación entre instituciones”, existen acuerdos y estrategias que fortalecen la seguridad en los límites interestatales y en la frontera con Estados Unidos. Además, sostiene que “seguimos trabajando unidos por la tranquilidad y el bienestar de nuestra gente”.
Sin embargo, este discurso resulta engañoso y contrastante con la realidad que vive la población en la zona fronteriza de Nuevo León y Tamaulipas. A continuación te exponemos los principales puntos de contraste:
1. Persistencia de la violencia y control criminal
A pesar de las reuniones y supuestas estrategias conjuntas, la región de Doctor Coss, Miguel Alemán, Camargo y municipios aledaños sigue siendo escenario de enfrentamientos armados, quema de vehículos, ejecuciones y desplazamientos forzados. Las balaceras entre el Cártel del Noreste (CDN), el Cártel del Golfo (CDG) del “Primito y su hermano el R8”.Los choques armado entre células son hechos documentados por medios locales, nacionales y en redes sociales, con imágenes y testimonios que desmienten cualquier sensación de “tranquilidad”.
2. Acuerdos que no se traducen en resultados
Las reuniones entre gobernadores y mandos de seguridad se han repetido durante años, con promesas de “blindaje”, inversión en patrullas, personal, y cuarteles ademas de coordinación operativa. Sin embargo, la realidad es que la presencia de Fuerza Civil, Guardia Nacional y Ejército no ha logrado contener el avance de los grupos criminales ni garantizar la seguridad de la población. Los hechos violentos continúan, y la percepción ciudadana es de miedo e indefensión.
3. Contradicciones en los datos oficiales
Mientras el gobernador y sus pares presumen una reducción en homicidios y una supuesta mejoría en la seguridad, los reportes de violencia en la región fronteriza contradicen estas cifras. Los ataques y asesinatos no sólo persisten, sino que en ocasiones se incrementan.Las cifras oficiales, además, suelen estar sujetas a manipulación o “reclasificación” de delitos.
4. Falta de atención a las víctimas
El discurso oficial ignora la situación de las comunidades desplazadas, los negocios cerrados, las escuelas sin clases y el éxodo de familias enteras que huyen de la violencia. No hay programas integrales de atención a víctimas, ni mecanismos efectivos de protección para la población civil atrapada en el fuego cruzado.
5. Evidencia en redes y medios
Las redes sociales y medios independientes han documentado, casi en tiempo real, los enfrentamientos, bloqueos, cuerpos abandonados y el terror cotidiano en la región. Este flujo de información, muchas veces acompañado de imágenes y videos, desmiente la narrativa oficial y exhibe la brecha entre el discurso gubernamental y la realidad.
A la luz de la evidencia tangible que muestran tanto la imagen como los acuerdos y declaraciones derivados de la reciente Reunión Regional Noreste de Seguridad Pública, es válido cuestionar la utilidad real de muchos de los funcionarios y mandos presentes en la fotografía, no como ofensa, sino como una evaluación crítica de su eficacia frente a los resultados observables en la región.
¿Por qué se perciben como “inútiles” los presentes?
1. Resultados insuficientes frente a la crisis
- A pesar de la presencia de gobernadores, secretarios de seguridad, fiscales, altos mandos militares y representantes federales, la violencia en la frontera noreste persiste: enfrentamientos armados, desplazamientos, asesinatos y control criminal sobre rutas estratégicas siguen siendo cotidianos, particularmente en la zona ribereña y los límites interestatales.
- Los acuerdos y estrategias anunciados en cada reunión (patrullajes conjuntos, inversión en infraestructura, mesas de análisis, intercambio de información) no se han traducido en una reducción perceptible y sostenida de la violencia para la población civil.
2. Repetición de discursos y promesas
- Los discursos oficiales repiten fórmulas sobre “coordinación”, “trabajo conjunto” y “blindaje”, pero la realidad en el terreno desmiente los avances proclamados por los gobernadores y funcionarios. La percepción ciudadana, reflejada en encuestas y testimonios, es de desconfianza y hartazgo ante la falta de resultados tangibles.
- Las reuniones a puerta cerrada, sin acceso a medios ni rendición de cuentas transparente, refuerzan la imagen de una burocracia que prioriza la simulación sobre la solución efectiva de los problemas.
3. Falta de innovación y autocrítica
- La presencia de tantos funcionarios de alto nivel no ha generado estrategias innovadoras ni respuestas integrales a la crisis de seguridad. Se privilegia el despliegue militar y policiaco, sin atender las causas estructurales ni ofrecer protección real a las víctimas.
- La ausencia de autocrítica y la tendencia a celebrar supuestos “avances” en medio de una crisis persistente refuerzan la percepción de ineficacia.
Por que no los contratarían en la iniciativa privada
La razón por la que muchos de los funcionarios que aparecen en la imagen no serían contratados en la iniciativa privada es un problema estructural y ampliamente documentado en México. No es una cuestión de ofensa, sino de desempeño y perfil profesional:
- Falta de rigor y cultura de resultados: La iniciativa privada privilegia la eficiencia, el cumplimiento de metas y la productividad. Nueve de cada diez exfuncionarios públicos son rechazados por empresas privadas porque suelen mostrar poco rigor en la administración de recursos, débil cultura de evaluación y bajo desempeño en ambientes de presión y objetivos claros.
- Mala reputación y estigmas: Existe un estigma fuerte hacia quienes vienen del sector público, ya que se percibe que no cumplieron con su labor, no son competitivos y tienden a atender mal. Esto se agrava en niveles directivos, donde se espera liderazgo, innovación y capacidad de adaptación a entornos cambiantes, características poco asociadas a la burocracia gubernamental.
- Prácticas incompatibles: Muchos exfuncionarios están acostumbrados a administrar presupuestos sin importar resultados, incluso gastando por gastar para no perder recursos el siguiente año, una práctica inaceptable en la empresa privada, donde el ahorro y la maximización de recursos son fundamentales.
- Déficit de habilidades técnicas y actualización: A menudo carecen de habilidades para incrementar ventas, reducir costos o innovar en procesos, y suelen estar desactualizados en conocimientos y manejo de equipos modernos. La iniciativa privada busca talento adaptable, actualizado y orientado a resultados, no sólo a cumplir procedimientos.
- Temor a la politización: Las empresas privadas temen que un exfuncionario lleve prácticas políticas o busque influir en la organización por intereses ajenos al negocio, lo cual puede afectar la cultura y el clima laboral.
En resumen, la mayoría de estos funcionarios no serían contratados en la iniciativa privada porque no cumplen con los estándares de eficiencia, productividad, innovación y adaptabilidad que exige el sector empresarial. El problema es sistémico y se repite cada vez que se compara el desempeño del aparato público con el privado en México.
Conclusión
En la imagen se observan 39 altos funcionarios y mandos, pero la utilidad de su presencia y sus acuerdos queda en entredicho ante la continuidad de la violencia y la falta de resultados palpables para la población. El calificativo de “inútiles” no es un insulto, sino una constatación del vacío entre el aparato institucional reunido y la realidad que enfrentan diariamente los habitantes de la frontera noreste. La utilidad de un funcionario público se mide por el impacto de sus acciones, no por su asistencia a reuniones o la reiteración de discursos.
El discurso del gobernador que presume coordinación y avances en seguridad, es engañoso y no resiste el contraste con la evidencia en el terreno. La violencia persiste, los grupos criminales mantienen el control de rutas y territorios, y la población sigue siendo la principal víctima de una estrategia de seguridad que, hasta ahora, ha sido más mediática que efectiva.
Combatir la violencia con peroratas recicladas requiere más que discursos y reuniones: se necesita transparencia, rendición de cuentas, atención real a las víctimas, una estrategia integral que vaya más allá de la militarización y el “blindaje” superficial, pero principalmente que Americo Villarreal Anaya deje de ser su COMPLICE”.
Con informacion: @LosBloqueados2/
Pues así están todos hasta el dicho dice que si quieres resultados diferentes no hagas siempre las mismas cosas y falta ver que todos los jefazos policiacos de nuevo León Y esa zona son los mismos desde que estaban los Zetas.
ResponderBorrarQuién se beneficia de que siga esa "y estrategia" que beneficia a pocos y empacha uniformados.
Pero eso ya no solo atole con el dedo eso es lechita pero con ubre de burro y conste que no dije burra.