El diputado local de Morena Marco Antonio Gallegos Galván, nativo de Reynosa, se atrevió a votar a favor de una propuesta del PAN, que favorece a Cabeza de Vaca y ahora enfrenta los reclamos de Morena.
El legislador niega que haya incurrido en traición a su partido y a la gente que votó por él y centra su defensa en el hecho de que él no está obligado a obedecer la línea o consignas, sino que vota de manera razonada y atendiendo los dictados de su conciencia.
Pero sus detractores piensan diferente, al acusarlo de que tal vez recibió sobornos para reventar la votación mayoritaria que iba a echar al traste con la propuesta de la reforma al Código Municipal, para dejar de estar sujetos a la supervisión del gobierno del Estado.
En Reynosa, el propio presidente municipal Carlos Peña Ortiz no se anduvo por las ramas y calificó a Gallegos Galván de traidor, y fue más allá, al revelar que el legislador está resentido porque no le dieron las posiciones que pidió para los suyos, en el Ayuntamiento fronterizo.
Muy pronto enseñó el cobre este joven diputado que llegó al poder postulado por Morena pero de indudable chip priista, pues es adorador del tráfico de influencias y de las cuotas de poder.
El poder corruptor de Cabeza de Vaca sigue envileciendo el ejercicio de la política en Tamaulipas, pues seduce a algunos adversarios no con el poder de la persuasión, la conciencia ideológica y sus ideas de avanzada, sino golpeándoles los bolsillos con billetes de banco.
En septiembre se cumplirán seis años de la alternancia de partidos políticos en el poder ejecutivo local, pero los hechos demuestran que no fue para bien de la sociedad, pues las cosas al interior del gobierno siguen igual, si no es que peor.
Las elecciones del domingo 5 de junio darán otro viraje a la historia del Estado, pues se repetirá el proceso de cambio de programa partidista al llegar al poder Morena, con un candidato cuya principal prenda social, es la honestidad, la probidad, la honradez.
El ciclo sexenal de Cabeza de Vaca ha sido una pérdida de tiempo, pues además de la opacidad en el manejo de recursos económicos, no se construyeron obras relevantes en ninguna parte del territorio cuerudo.
Este gobierno será una mancha imborrable en la historia de Tamaulipas y aun así, los panegiristas del mandatario de extracción del PAN, tratan desesperadamente de cubrirle las espaldas con la piadosa mentira de que vuelve a ser presidenciable.
Francisco debe darse de santos de no caer preso, todavía, pues existe el expediente penal con suficiente información para hacer cumplir la orden de aprehensión que existe en su contra, por tres delitos federales, graves.
Con informacion de:Alberto Guerra/ElMañana de Nuevo Laredo/
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