Una juez estatal que vive en Texas pero trabaja en esta ciudad fronteriza Mexicana parece continuar sus esfuerzos para liberar a narcotraficantes vinculados pertenecientes a cárteles que son presentados en su corte. Previamente la jueza liberó bajo circunstancias sospechosas a varios sicarios que han sido vinculados a múltiples ejecuciones en esta ciudad fronteriza.
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Martiza Gonzalez Flores, ha estado trabajando como juez estatal en Coahuila mientras vive en Eagle Pass. En los últimos meses, Breitbart Texas ha reportado sobre varios casos donde González Flores ha permitido sicarios y presuntos narcotraficantes vinculados a cárteles de droga salgan de su juzgado bajo decisiones sospechosas. Afirmando falta de pruebas, documentos presentados incorrectamente y simplemente afirmando que no cree en la palabra de los investigadores, la juez se ha ganado el desprecio de varios oficiales encargados de hacer cumplir la ley en el área.
Nueva información obtenida por este medio revela que González Flores continúa liberando a narcotraficantes relacionados con los cárteles que operan en la zona. De acuerdo con la información del caso número 127/2018, las autoridades arrestaron a Hugo Alejandro Riojas Morales, de 47 años, en Piedras Negras luego de encontrarlo con dos paquetes de marihuana que pesaban alrededor de 5 libras.
Las autoridades lo habían acusado de posesión de narcóticos con fines de distribución, sin embargo, el caso fue desestimado por González Flores, quien dictaminó que el arresto era ilegal. La juez afirmó que el tiempo desde que las autoridades arrestaron a Riojas hasta el momento en que se complemento la detención no hubo suficiente tiempo para que la policía pudiera leerle sus derechos y seguir los procedimiento. González Flores dictaminó que no creía que las autoridades hubieran seguido los procedimientos y ordenó la liberación del sospechoso.
En otro caso, González Flores redujo los cargos para otro traficante de drogas para que fuese liberado después de otorgarle una fianza de 200 dólares. En el caso 125/2018, autoridades estatales arrestaron a Cooper Alberto Gutiérrez Hernández, de 19 años, y a Karina Guadalupe Pineda Gil, de 20 años, después de encontrar aproximadamente una libra de marihuana en su vehículo. Las autoridades intentaron acusar a ambos de posesión de narcóticos con fines de distribución. González Flores desestimó los cargos contra Pineda alegando que ella no era drogadicta, y en el caso de Gutiérrez, redujo sus cargo a una posesión simple. Los fiscales intentaron argumentar que Gutiérrez tenía otros casos pendientes y se lo considera riesgo de fuga ya que es ciudadano de Estados Unidos. La juez ignoró los argumentos y estableció su fianza en el equivalente a 200 dólares.
Con informacion de:Breitbart/TX
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