Un ex agente de la Policía Federal (PF) investigado
por presuntos vínculos con el narcotráfico se entregó a la justicia de Estados
Unidos, informó el Comisionado de la corporación, Manelich Castilla.
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En conferencia de prensa, el funcionario
mencionó que en noviembre del año pasado, se detectó que el individuo,
identificado como Iván Reyes Arzate, mantenía relación con un operador de la
organización criminal de los Beltrán Leyva.
Castilla explicó que la Unidad de Asuntos Internos de la PF abrió una investigación en su contra y además lo separó ese mismo mes de la corporación en la que estuvo 16 años.
Al conocer que tanto las autoridades de México como Estados Unidos lo investigaban, Iván decidió entregarse voluntariamente a la Fiscalía de Chicago.
El ex policía federal es acusado de obstruir labores de inteligencia en una investigación relevante para ambos países, a cambio de un beneficio personal.
"La Comisión Nacional de Seguridad y la Policía Federal refrendar su indeclinable compromiso con la seguridad de las y los mexicanos, así como su permanente obligación con la sociedad de llevar ante la justicia a quienes se separen de la legalidad y colaboren en cualquier modalidad de delincuencia organizada", afirmó Castilla.
"Queremos ser muy claros y muy firmes, en la Policía Federal ni habrá cabida para aquellas personas que mancillen la honorabilidad de las instituciones actuando en detrimento de la misión de proteger y servir".
El Comisionado aseveró que tampoco habrá espacio dentro de la corporación para aquellos que traicionen los ideales de la institución y del País.
"Serán juzgados, serán perseguidos", añadió.
Castilla explicó que la Unidad de Asuntos Internos de la PF abrió una investigación en su contra y además lo separó ese mismo mes de la corporación en la que estuvo 16 años.
Al conocer que tanto las autoridades de México como Estados Unidos lo investigaban, Iván decidió entregarse voluntariamente a la Fiscalía de Chicago.
El ex policía federal es acusado de obstruir labores de inteligencia en una investigación relevante para ambos países, a cambio de un beneficio personal.
"La Comisión Nacional de Seguridad y la Policía Federal refrendar su indeclinable compromiso con la seguridad de las y los mexicanos, así como su permanente obligación con la sociedad de llevar ante la justicia a quienes se separen de la legalidad y colaboren en cualquier modalidad de delincuencia organizada", afirmó Castilla.
"Queremos ser muy claros y muy firmes, en la Policía Federal ni habrá cabida para aquellas personas que mancillen la honorabilidad de las instituciones actuando en detrimento de la misión de proteger y servir".
El Comisionado aseveró que tampoco habrá espacio dentro de la corporación para aquellos que traicionen los ideales de la institución y del País.
"Serán juzgados, serán perseguidos", añadió.
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