Un policía del Departamento de Carreteras de la Florida había detenido a un vehículo por una falta menor: una de sus ventanas tenía un tinte ilegal. Pero el agente jamás se pensó que lo encontraría sería mucho peor.
El policía descubrió más de $1.2 millones en cocaína, que la conductora llevaba escondida en su automóvil.
Funcionarios de la Patrulla de Carreteras de Florida señalaron que las autoridades estaban patrullando de rutina por la carretera interestatal 75, a la altura de Bushnell. Los hechos ocurrieron el martes por la tarde cuando la policía vio a un Dodge Journey con un tinte ilegal en sus ventanas.
Los agentes detuvieron al automóvil, que estaba conducido por Elizabeth Espinoza, de 27 años. Vieron que la mujer se estaba poniendo nerviosa ante la presencia de la policía, por lo que trajeron a un perro de la Patrulla Canina K9 para que inspeccionara el vehículo.
Tras su “inspección olfativa”, el animal encontró 12 kilos de cocaína que estaban escondidos en el tablero frontal del vehículo y en algunas zonas de la parte trasera, según explicaron las autoridades.
Espinoza fue arrestada por múltiples cargos, entre ellos la posesión de cocaína y tráfico de cocaína. Fue trasladada a la cárcel y se desconoce su situación judicial en estos momentos.
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