Los investigadores del FBI y de Nueva Jersey han recopilado documentos de empleo e información que supervisores del club de golf del presidente Donald Trump proporcionaron a inmigrantes no autorizados para trabajar, informó este sábado el Washington Post.
El abogado de Newark, Anibal Romero, le dijo al periódico que entregó tarjetas de residencia permanentes falsas y números de Seguridad Social fraudulentos que, según expresó, fueron dados a uno de sus clientes por los gerentes del Trump National Golf Club. También proporcionó los talones de pago que le fueron proporcionados a otro de sus clientes.
Romero, quien representa a cinco inmigrantes que, según él, eran indocumentados cuando trabajaban para el club de Trump en Nueva Jersey, dijo que se reunió con dos agentes del FBI e investigadores de la oficina del fiscal general del estado de Nueva Jersey el mes pasado. Los agentes federales dijeron que iban a "coordinarse" con los investigadores estatales.
El New York Daily News informó el sábado que Romero entregó documentos a funcionarios estatales, pero solo los discutió con los agentes del FBI.
"Confío en que las autoridades federales y estatales realizarán una investigación completa y exhaustiva", dijo Romero al News.
Ambos diarios informaron que Romero dijo que uno de los agentes del FBI le dijo por teléfono que había "recibido una referencia" de la oficina del asesor especial Robert Mueller sobre el abogado y la información que tenía.
Romero había contactado con anterioridad a la oficina de Mueller, pero se le dijo que la situación estaba fuera de su jurisdicción , según el News.
La política de la oficina del fiscal del estado no es confirmar o negar la existencia de una investigación en curso. El FBI no quiso hacer comentarios.
A principios de este mes, Romero dijo al News y al North Jersey Record que la oficina del fiscal general también lo había contactado sobre los informes de sus clientes en torno al acoso racial y las amenazas que presuntamente sufrieron mujeres que fueron sometidas por sus supervisores.
Una de las clientes de Romero, Victorina Morales, nativa de 45 años, hizo pública una entrevista en el New York Times a principios de diciembre sobre sus tres años de trabajo en el resort de Trump en Nueva Jersey; como inmigrante indocumentada limpiaba las habitaciones de Trump. Romero señaló que los administradores del resort le proporcionaron tarjetas verdes falsas y números de Seguro Social cuando ella trabajaba allí ilegalmente.
Morales le comentó al Post el sábado que ella se había presentado en parte para resaltar la "hipocresía" de un presidente que critica a los inmigrantes indocumentados mientras trabajan en su club.
Morales aseguró que ingresó ilegalmente a los Estados Unidos en 1999 y comenzó a trabajar en el Trump National Golf Club en 2013 en donde le afirmaron que su estado laboral "no importaba".
La Organización Trump dijo después de la publicación de la historia de Morales en el Times que la compañía tiene "prácticas de contratación muy estrictas"."
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