En el sexenio de Egidio Torre Cantú, policías estatales habrían participado en la detención arbitraria y desaparición forzada de tres jóvenes en Ciudad Victoria, quienes presuntamente fueron entregados a la delincuencia organizada en febrero de 2014.
Así lo determinó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en su recomendación 73/2017, en la que acusa también a la Procuraduría General de la República (PGR) de iniciar la investigación después de dos años de que se denunciaron los hechos.
Los tres jóvenes fueron vistos por última vez el 25 de febrero de 2014 en la Colonia Asunción Gómez, de Ciudad Victoria.
Gracias a que uno de los jóvenes envió un mensaje a su hermana para decirle que estaba en una casa anaranjada cerca del trabajo de su papá, pudieron localizar en la zona la motocicleta de su amigo.
Como el padre del joven de la motocicleta era capitán del Ejército, pidió apoyo del 77 Batallón de Infantería; sin embargo, cuando revisaron el inmueble, ya estaba vacío.
Los familiares interpusieron diversas denuncias, incluso ante la Unidad Especializada en Investigación de Delitos en Materia de Secuestro de la PGR.
Según las pruebas que obtuvo la CNDH, fue hasta el 5 de enero de 2015 que una persona que había sido detenida por pertenecer a una banda de secuestradores declaró que pertenecía a Los Zetas y reconoció a las víctimas.
Él dijo que los jóvenes les fueron entregados por policías estatales, y después fueron trasladados a un campamento conocido como "El Hilo", donde los torturaron y mataron, ya que, supuestamente, robaron motos y tiendas de conveniencia.
Por este caso, la CNDH le pidió al gobernador Francisco García Cabeza de Vaca inscribir a los afectados en el registro estatal de víctimas e instruir a la SSP a colaborar con la indagatoria.
Mientras que a la PGR le recomendó perfeccionar la averiguación previa hasta esclarecer lo ocurrido y localizar a los jóvenes desaparecidos.
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