México y Estados Unidos estudian si se pueden
desplegar alguaciles aéreos estadounidenses armados en vuelos comerciales
transfronterizos, de acuerdo con un documento oficial obtenido por Reuters y
con un funcionario mexicano.
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Desde que Donald Trump asumió como Presidente, el 20
de enero del 2017, México ha intentado mejorar la cooperación en seguridad,
migración y política exterior con su vecino.
Esto, dijeron funcionarios mexicanos y estadounidenses, con la esperanza de convencer a Trump de adoptar una postura más suave con el Tratado de Libre Comercio (TLC).
En el 2003 y a raíz de los atentados del 11 de septiembre del 2001, México acordó colocar sus agentes en vuelos, pero dijo que nunca permitiría que estadounidenses estuvieran a bordo de sus líneas aéreas, mucho menos armados.
Ahora, esto parece haber cambiado.
En una reunión el pasado 18 de enero en México, funcionarios de ambos países acordaron "estudiar la conveniencia de negociar un acuerdo para el despliegue de Federal Air Marshals (FAM) en vuelos comerciales", según un documento oficial mexicano.
Un funcionario mexicano aseguró que la parte más difícil de las negociaciones es permitir que agentes estadounidenses porten armas porque su uso por parte de extranjeros en México es un tema sensible.
Añadió que no se había decidido si los alguaciles viajarían en vuelos a Estados Unidos, en viajes hacia México o en ambos, además de que no hay una fecha para un acuerdo.
Estados Unidos declinó hablar del tema con Reuters, pero anoche la Cancillería mexicana admitió que está evaluando su viabilidad y ventajas sin que haya aún algún acuerdo.
Esto, dijeron funcionarios mexicanos y estadounidenses, con la esperanza de convencer a Trump de adoptar una postura más suave con el Tratado de Libre Comercio (TLC).
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Ahora, esto parece haber cambiado.
En una reunión el pasado 18 de enero en México, funcionarios de ambos países acordaron "estudiar la conveniencia de negociar un acuerdo para el despliegue de Federal Air Marshals (FAM) en vuelos comerciales", según un documento oficial mexicano.
Un funcionario mexicano aseguró que la parte más difícil de las negociaciones es permitir que agentes estadounidenses porten armas porque su uso por parte de extranjeros en México es un tema sensible.
Añadió que no se había decidido si los alguaciles viajarían en vuelos a Estados Unidos, en viajes hacia México o en ambos, además de que no hay una fecha para un acuerdo.
Estados Unidos declinó hablar del tema con Reuters, pero anoche la Cancillería mexicana admitió que está evaluando su viabilidad y ventajas sin que haya aún algún acuerdo.
El lado jocoso de la Noticia....
fuente.-
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