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| Imagen.-El Norte.com |
El Gobernador de Tamaulipas es persona non-grata entre
sus vecinos. Simplemente, no lo quieren, y lo han acusado de hacer trampa para
querer meterse en un exclusivo club, violando reglas internas.
Francisco García Cabeza de Vaca compró un departamento de 14.3 millones de pesos –aunque estimaciones dicen que puede valer hasta 50 millones-, en Santa Fe, en la Ciudad de México. Sin embargo, los administradores del fraccionamiento le han negado el acceso al club de golf pues aseguran que no cumplió con los reglamentos para nuevos socios. El gobernador Francisco Cabeza inició una pelea legal, y dos años después, un juez federal les da la razón alos vecinos. Cabeza de Vaca tiene derecho a su departamento, pero no al club de golf.
Francisco García Cabeza de Vaca compró un departamento de 14.3 millones de pesos –aunque estimaciones dicen que puede valer hasta 50 millones-, en Santa Fe, en la Ciudad de México. Sin embargo, los administradores del fraccionamiento le han negado el acceso al club de golf pues aseguran que no cumplió con los reglamentos para nuevos socios. El gobernador Francisco Cabeza inició una pelea legal, y dos años después, un juez federal les da la razón alos vecinos. Cabeza de Vaca tiene derecho a su departamento, pero no al club de golf.
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Mientras en Tamaulipas hay miles de problemas mucho más importantes, el
Gobernador ha estado peleando su derecho a jugar golf en la colonia donde vive
en la Ciudad de México. Ha acudido a tribunales locales y federales. Las
demandas, según dijo, eran porque lo hacían quedar “en ridículo”.
Sobre el origen de su riqueza y la de su familia, ya no ha dado explicaciones. Como muchos otros gobernadores, su cargo lo protege de cualquier acusación, investigación, o rendición de cuentas claras.
Sobre el origen de su riqueza y la de su familia, ya no ha dado explicaciones. Como muchos otros gobernadores, su cargo lo protege de cualquier acusación, investigación, o rendición de cuentas claras.
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“Todos los partidos políticos, y muchas de nuestras instituciones, están en un
momento crítico: las y los ciudadanos difícilmente les creemos, y ya no
soportamos más simulaciones. Estamos cansados, muy cansados, de los escándalos
de corrupción, de la impunidad rampante, de las violaciones a los derechos
humanos”, afirmó ayer la organización Mexicanos contra la Corrupción.
Efectivamente, el Estado de Derecho está lastimado en México y en Tamaulipas. No parece haber ley ni justicias para la mayoría. Hay miles de personas desaparecidas, de mujeres violentadas, de niños huérfanos víctimas de la violencia, de medios de comunicación amenazados, y de periodistas muertos o amordazados.
El gobierno de Francisco García Cabeza de Vaca, parece que se mueve, pero no para defender a los ciudadanos, ni para llevar paz y justicia a los hogares de Tamaulipas.
Mientras la violencia crece, mientras la corrupción aumenta, mientras hasta el presidente Enrique Peña Nieto canceló su gira a Tamaulipas la semana pasada porque no hay seguridad suficiente para su visita, al gobierno de Cabeza de Vaca lo único que parece interesarle es jugar a la política, combatir a sus supuestos enemigos, incluso dentro de su propio partido, y bloquear al partido Morena que amenaza al gobierno actual.
A Francisco García Cabeza de Vaca se le ha acusado de abusar de su poder político en varias ocasiones.
Lo hizo contra la alcaldesa Maki Ortiz, en Reynosa.
“El 10 de enero del 2017, el Congreso del Estado hizo una amonestación pública a la alcaldesa Maki Esther Ortiz Domínguez por el ilegal nombramiento de 5 funcionarios del Ayuntamiento de Reynosa. También, dio vista a la Contraloría Gubernamental y la Procuraduría General de Justicia del Estado, a fin de que investiguen si la alcaldesa incurrió en faltas administrativas y penales, para que procedan a sancionarla, en su caso”, publicaron medios de Tamaulipas.
Efectivamente, el Estado de Derecho está lastimado en México y en Tamaulipas. No parece haber ley ni justicias para la mayoría. Hay miles de personas desaparecidas, de mujeres violentadas, de niños huérfanos víctimas de la violencia, de medios de comunicación amenazados, y de periodistas muertos o amordazados.
El gobierno de Francisco García Cabeza de Vaca, parece que se mueve, pero no para defender a los ciudadanos, ni para llevar paz y justicia a los hogares de Tamaulipas.
Mientras la violencia crece, mientras la corrupción aumenta, mientras hasta el presidente Enrique Peña Nieto canceló su gira a Tamaulipas la semana pasada porque no hay seguridad suficiente para su visita, al gobierno de Cabeza de Vaca lo único que parece interesarle es jugar a la política, combatir a sus supuestos enemigos, incluso dentro de su propio partido, y bloquear al partido Morena que amenaza al gobierno actual.
A Francisco García Cabeza de Vaca se le ha acusado de abusar de su poder político en varias ocasiones.
Lo hizo contra la alcaldesa Maki Ortiz, en Reynosa.
“El 10 de enero del 2017, el Congreso del Estado hizo una amonestación pública a la alcaldesa Maki Esther Ortiz Domínguez por el ilegal nombramiento de 5 funcionarios del Ayuntamiento de Reynosa. También, dio vista a la Contraloría Gubernamental y la Procuraduría General de Justicia del Estado, a fin de que investiguen si la alcaldesa incurrió en faltas administrativas y penales, para que procedan a sancionarla, en su caso”, publicaron medios de Tamaulipas.
NOTA RELACIONADA:
Maki Ortiz anunció después que hizo las paces con el Gobernador.
A Cabeza de Vaca se le señaló de orquestar una campaña contra sus rivales políticos, entre ellos Carlos Canturosas y la ex alcaldesa de Matamoros, Lety Salazar.
“Lo que menos se esperaba es que este gobierno que encabeza, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, fuera contra de los propios panistas, me refiero a los ex alcaldes de Nuevo Laredo, Carlos Enrique Canturosas Villarreal y de Leticia Salazar Vázquez; sin embargo, esto creo es más político que de cuentas públicas”, escribió el columnista Salvador Leal Luna.
“Hoy más que nunca se ve que los titulares de la Auditoría Superior del Estado, de la Procuraduría General de Justicia, como del Zar Anticorrupción, son a modo de quien los puso ahí…”, sentenció a finales del 2017.
A Ramón Garza Barrios, también dijo que lo tenía en la mira: “Agarró boleto”, le mandó decir.
Y hasta el arresto de Eugenio Hernández parece que es selectivo.
A Cabeza de Vaca se le señaló de orquestar una campaña contra sus rivales políticos, entre ellos Carlos Canturosas y la ex alcaldesa de Matamoros, Lety Salazar.
“Lo que menos se esperaba es que este gobierno que encabeza, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, fuera contra de los propios panistas, me refiero a los ex alcaldes de Nuevo Laredo, Carlos Enrique Canturosas Villarreal y de Leticia Salazar Vázquez; sin embargo, esto creo es más político que de cuentas públicas”, escribió el columnista Salvador Leal Luna.
“Hoy más que nunca se ve que los titulares de la Auditoría Superior del Estado, de la Procuraduría General de Justicia, como del Zar Anticorrupción, son a modo de quien los puso ahí…”, sentenció a finales del 2017.
A Ramón Garza Barrios, también dijo que lo tenía en la mira: “Agarró boleto”, le mandó decir.
Y hasta el arresto de Eugenio Hernández parece que es selectivo.
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“Dicen que la venganza es un platillo que se prepara en frío. Durante su
mandato, Eugenio Hernández Flores buscó por todos los medios enjuiciar a Javier
García Cabeza de Vaca y siempre se opuso a que las cuentas del ex alcalde de
Reynosa fueran aprobadas en espera de encontrar una rendija para conseguir su
objetivo. Pero todo fue en vano y el ahora gobernador continuó su ascendente
carrera política. Hoy los papeles se invirtieron”, escribió el columnista
Mauricio Fernández Díaz.
El hecho es que García Cabeza de Vaca parece usar y abusar del poder del Estado para atacar a sus contrincantes, enemigos u obstáculos.
En algunos casos, hay elementos para cuestionarlos, para investigarlos. El problema es cuando la justicia es selectiva, es de revancha, es visceral, y busca intimidar a base de fuerza y amenazas.
Cabeza de Vaca, el gobernador del “depa” de lujo, pelea lo que considera suyo, aunque lo acusen de hacer trampa. Le preocupa conservar su riqueza, no aclarar su origen. Le interesa acabar con sus enemigos políticos, no hacer justicia.
El Gobernador parece usar al Estado para entregar su cuota al PRI-AN, y perjudicar a Morena y a Andrés Manuel López Obrador.
La justicia debe ser pareja, sin torceduras de partidos o intereses.
“El primer paso para cambiar esta dolorosa realidad es que en México deje de importar quién seas y de dónde vengas; queremos que la justicia sea la misma para todos”, escribió Mexicanos contra la Corrupción.
Estamos completamente de acuerdo.
El hecho es que García Cabeza de Vaca parece usar y abusar del poder del Estado para atacar a sus contrincantes, enemigos u obstáculos.
En algunos casos, hay elementos para cuestionarlos, para investigarlos. El problema es cuando la justicia es selectiva, es de revancha, es visceral, y busca intimidar a base de fuerza y amenazas.
Cabeza de Vaca, el gobernador del “depa” de lujo, pelea lo que considera suyo, aunque lo acusen de hacer trampa. Le preocupa conservar su riqueza, no aclarar su origen. Le interesa acabar con sus enemigos políticos, no hacer justicia.
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La justicia debe ser pareja, sin torceduras de partidos o intereses.
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Estamos completamente de acuerdo.
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