Johnny Hurtado Olascoaga, alías “El Pez”, líder de La Familia Michoacana (LFM), es uno de los objetivos principales de las fuerzas de seguridad mexicanas debido a los hechos violentos que ha cometido. Es por ello que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha seguido de cerca sus movimientos, documentándolos en archivos que fueron hackeados por Guacamaya.
Con total inmunidad y bajo el cobijo de autoridades locales, “El Pez” se mueve libremente por toda la región de Tierra Caliente -la cual comprende municipios de Michoacán, Guerrero y el Estado de México- . Pese a tener conocimiento de sus movimientos, el Ejército mexicano nunca intentó detenerlo.
Los informes filtrados, obtenidos del intercambio de correos electrónicos entre personal de la Sedena, comienzan el 2 de febrero de 2017 y concluyen junto al mandato del presidente Enrique Peña Nieto, el 30 de noviembre de 2018.
El primer informe detalla el comienzo de la presión de La Familia Michoacana hacia el entonces presidente municipal de San Miguel Totolapan, Juan Mendoza Acosta, para que el Ejército instalara bases en la comunidad San Antonio Gavia y de esa manera obligar a sus acérrimos enemigos, Los Tequileros, a salir de sus escondites.
Este informe cobra relevancia, pues en él consta la rivalidad entre los grupos criminales que el 5 de octubre provocó una masacre en el municipio, en la que murieron el exalcalde referido en el reporte, junto a su hijo y actual alcalde, Conrado Mendoza, además de otras 18 personas.
Diariamente se documentaba el seguimiento que se le daba a “El Pez”, en los reportes no solo vertían las actividades del jefe de plaza, sino también las rivalidades de La Familia Michoacana. La más conocida es con Los Tequileros, pero también Guerreros Unidos eran sus némesis; además realizaron alianzas con Los Rojos.
Los Rojos solicitaron apoyo a Johny Hurtado Olascoaga para hacer frente a la Policía Comunitaria Tecampanera de Teloloapan, que repelía sus intentos por recuperar la plaza que Guerreros Unidos le arrebató.
También se le solicitó autorización a “El Pez” para seguir al entonces alcalde de Tololoapan, Robell Urióstegui Patiño, y en un momento dado poder ejecutarlo.
Los reportes sobre Johny Hurtado también registraron sus reuniones familiares, compras de equipo militar y de telecomunicaciones para no ser interceptados por las autoridades. Además se documentó la compra de dispositivos electrónicos, instrumentos musicales y artículos personales para “El Pez”.
el nivel de la desfachatez:
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