"YA EXPORTAMOS ESTRATEGIA de SANGRE y PLOMO": BANDAS SUB-CONTRATADAS por el CARTEL de SINALOA y el CJNG DISPARAN 600% la MATAZON en ECUADOR...empresas en expansion.

Los muertos por los enfrentamientos en las cárceles de Ecuador entre Los Choneros contra Los Lagartos y Tiguerones han aumentado 600 por ciento este año.

De acuerdo con cifras de la Policía Nacional, en 2020 hubo 52 muertes violentas en centros penitenciarios, mientras que en lo que van del año, en cinco motines, la cifra se elevó hasta 324.

MILENIO entrevistó al jefe de la dirección antinarcóticos de Ecuador, el general Giovanni Ponce, quien reveló que los cárteles de Sinaloa y de Jalisco Nueva Generación contratan los servicios de bandas locales para mantener su poder y operaciones en el país sudamericano.

Algunos presos piden seguridad, pues los enfrentamientos han dejado muertos no involucrados con los cárteles. (Reuters)

Así, la organización fundada por Joaquín El Chapo Guzmán se hizo de los servicios de Los Choneros y los liderados por Nemesio Oseguera, El Mencho, de Los Lagartos, Los Tiguerones y Los Lobos.

Con estas cuatro bandas, los cárteles mexicanos han expandido su lucha de sangre y plomo hasta Ecuador y ha encontrado en sus cárceles uno de los escenarios de estas disputas.

Una muestra del poder bélico de los cárteles mexicanos se asoma detrás de las rejas: de los 40 mil presos que habitan en las cárceles de Ecuador, 25 mil forman parte de las bandas que trabajan para Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, revela un informe de la Coordinación de Seguridad Penitenciaría de la Policía.

Masacre en vivo

En lo que va del año se han registrado cinco enfrentamientos entre las bandas subcontratadas por los cárteles mexicanos, el del pasado 28 de septiembre fue el más sangriento con 119 muertos en la Penitenciaria del Litoral en Guayaquil.

Violencia en Ecuador se recrudece con presencia de cárteles mexicanos

Cuarenta y cinco días después, la madrugada del 13 de noviembre, un nuevo enfrentamiento se reportó en el mismo lugar en el Centro de Privación de Libertad CPLGuayas Núm 1, cuando un grupo de reclusos entró con violencia al pabellón 2.

Varios de los reos hicieron transmisiones en vivo de los hechos en Facebook, en las que clamaban ayuda a las autoridades y pedían difundir los videos.

“Nos tienen encerrados en nuestro propio pabellón, nos quieren matar a todos, a todos. Aquí está un dron pero no hace absolutamente nada, señores”, relata.

Mientras se escuchan cada vez más intensos los golpes en las puertas de metal, el narrador sigue: “¡Sálvenos, por favor!, nos están queriendo tumbar la puerta de afuera del pabellón”.

El video muestra en el fondo a los demás presos en la puerta de la celda con la incertidumbre de que ingresen los agresores, al tiempo que también claman “ayuda”.

En un segundo video se ve que ya ingresaron los agresores, prendieron fuego y se escuchan detonaciones de armas, mientras que el narrador comenta: “¡señores, por favor, hagan algo!, Nadie nos ayuda, están esperando que nos maten a todos. Hay muchas personas que están muertas. Por el amor de Dios, quieren incendiar todo el pabellón”.

En otros videos, que forman parte de las investigaciones de la Policía Nacional y de la Fiscalía de Ecuador en poder de MILENIO, se ve a los reclusos que improvisan una fogata en uno de los patios del pabellón para incinerar a los muertos.

El fuego lo alimentan con colchonetas y demás enseres flamables. Otros acaban de destrozar los cuerpos con palos, tubos y metales para que se consuman.

En otros videos de la Policía Nacional, se aprecia el ingreso del Ejército de Ecuador con tanquetas y de fuerzas especiales de seguridad para controlar el motín.

Al respecto, el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores emitió un comunicado en el que lamentó los hechos ocurridos en el Centro de Privación de Libertad CPLGuayas Núm 1 y confirmó, de manera preliminar 58 personas muertos y 12 heridos.

De los heridos, también se difundieron videos y forman parte de las pesquisas de las autoridades ecuatorianas, en los que se confirman los disparos de arma.

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