A pesar de que muchos priistas han festejado como un triunfo el presente proceso electoral 2015, en la realidad los números indican una debacle importante del partido, quien a pesar de estar de regreso en el poder, obtuvo la cantidad más baja de diputados en unas elecciones intermedias, en toda la historia moderna de la Cámara de Diputados.
Según las previsiones del INE, el PRI estaría obteniendo entre 198 y 203 escaños en la cámara baja, la cifra más pequeña obtenida por el partido tricolor en la historia de las elecciones intermedias.
La última vez que el PRI obtuvo una cifra tan baja de diputados fue las intermedias de 1973, donde alcanzó 189 escaños, no obstante en aquel entonces la cámara baja era de tan solo 231, es decir en realidad arrolló en el congreso, por lo que la votación de este 2015, es la que menor proporción de congreso ha dejado en unas elecciones intermedias para el partido que ha dominado la politica nacional durante casi un siglo.
Para el PRI alcanzar la mayoría en el congreso, ya no será algo tan sencillo como lo era antes, cuando su simple bancada era mayoría absoluta; esta vez las alianzas jugarán un papel primordial para que el partido pueda alcanzar la hegemonía a la que está acostumbrado,
Las expectativas eran grandes, pues a diferencia de las últimas intermedias del 2009, esta vez el PRI estaba en el poder federal, lo cual suponía una gran ventaja; la cual, apenas y les estaría alcanzando para llegar a 200 diputados, a reserva aún de los múltiples procesos de impugnación que continúan pendientes.
La suma de votos, además es equivalente a la obtenida por el PRI en el 85, cuando se alcanzaron también 11 millones y medio de votantes; es decir apenas y habría alcanzado las cifras que tenían hace 20 años, a pesar de que se tiene una lista nominal casi 20% más grande. Resulta notorio además que en 2012 llevaron a las urnas a más de 19 millones de votantes; es decir que en tan sólo 3 años, casi 9 millones menos de personas votaron por el PRI, lo que representa un desplome que debe causar preocupación en la sede del CEN nacional.
En esta tesis coinciden analistas como PabloHiriart, quien además subraya importantes derrotas para el PRI, quien estaría perdiendo en una sola elección, tres de los estados con mayor PIB, los cuales tenía bajo su poder: Nuevo León, Querétaro y Jalisco; “la gente votó enojada contra el desempeño de la economía, la inseguridad y la falta de combate a la corrupción”, sentencia el periodista.
Cabe señalar que además existen fuertes denuncias aún de fraude electoral; en redes sociales han circulado imágenes de actas alteradas, de resultados incorrectos, además de fuertes sospechas de la irregular alta votación que se registró en algunos municipios de Chiapas, los cuales conjuntados con los del Estado de México, donde también hay cientos de impugnaciones, están dando al PRI el empuje necesario para apenas y poder negociar una coalición para alcanzar la mayoría; y aunque muchos señalan a Nueva Alienza como el tercer elemento de la coalición mayoritaria; también hay fuertes indicios de que Encuentro Social será quien termine garantizando el dominio del PRI en el congreso, al menos por 3 años más.
Resulta interesante también el análisis de LeoZuckerman, quien resalta de igual forma la derrota del sistema de publicidad impuesto, el cual terminó ser ineficiente y desmedido; lo cual representa un golpe para la industria de la televisión, mientras que “los nuevos medios de Internet demostraron ser más eficaces que la estrategia de spots partidistas masificados”.
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