En los penales de Tamaulipas los reos viven del cobro de cuotas por protección, existen autogobiernos de los internos y hay áreas de privilegios, revela un estudio de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Los peor evaluados
Calificación dada por la CNDH a las cárceles de Tamaulipas:
5.23
Centro de Readaptación Social de Nuevo Laredo 2
5.25
Centro de Ejecución de Sanciones de Matamoros
5.64
Centro de Readaptación Social de Reynosa.
De acuerdo con el informe "Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2013", los Centros de Readaptación Social de Matamoros, Reynosa y de Nuevo Laredo no aprobaron la evaluación realizada por la dependencia.
El estudio de la CNDH, que fue dado a conocer apenas el mes pasado, se realizó en 129 centros penitenciarios del País, que se consideran los más poblados, en 20 centros federales y en tres prisiones militares.
Los tres reclusorios evaluados de Tamaulipas alcanzaron una calificación estatal promedio de 5.37 en el 2013, contra el 5.88 y el 5.67, obtenidos en el 2011 y 2012, respectivamente, lo que revela que la situación carcelaria empeora con el paso de los años.
La calificación más baja la obtuvo en el 2013 la cárcel de Nuevo Laredo 2, con 5.23; le sigue el de Matamoros, con 5.25, y en tercer sitio se ubicó la de Reynosa, con 5.64.
Según el estudio, el Centro de Readaptación Social Nuevo Laredo 2 fue calificado con 2.79 en el renglón de Condiciones de Gobernabilidad, la nota más baja en relación a los otros.
En aspectos que garantizan una estancia digna fue evaluado con 5.82 y en cuanto a los factores que aseguran la integridad física y moral del interno sacó 4.05.
"Existencia de área de privilegio, de objetos y sustancias prohibidas, existencia de internos que ejercen violencia o control sobre el resto de la población", reveló el estudio.
También documentó que hay presencia de cobros por parte de grupos de internos, falta de capacitación al personal de seguridad y técnico e insuficiente personal de custodia para traslados.
"Hay deficiencias durante el proceso de imposición de sanciones disciplinarias (no se respeta el derecho de audiencia y las sanciones no son determinadas por la autoridad competente)", señalan.
En el penal de Matamoros, las condiciones de gobernabilidad obtuvieron una calificación de 3.41. En aspectos que garantizan la integridad física y moral del interno la nota fue de 5.02, y en los factores que aseguran una estancia digna se llevó 4.91.
Las notas reprobatorias de la CNDH para los penales de Tamaulipas se repitieron en el Centro de Readaptación Social de Reynosa, que tiene una capacidad para alojar a mil 456 internos y que el día que se le visitó contaron una población de mil 563 reos.
En condiciones de gobernabilidad este penal obtuvo una calificación de 4.78; en aspectos que garantizan la integridad física y moral del interno sacó 4.21, y en factores que aseguran una estancia digna fue de 5.79.
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