Una compañía estadounidense desarrolló un dispositivo que a través de
descargas eléctricas es capaz de cambiar el estado de ánimo de las personas,
con sólo un click enviado desde su celular,con efectos semejantes al uso de
narcoticos.
Arizona,EE.UU 02/Dic/2014 La empresa Thync,
fundada por científicos de la Universidad Estatal de Arizona, probó en 100
sujetos el nuevo dispositivo, que con estimulación transcraneal de
corriente directa, puede dar al cerebro un efecto relajante, parecido a haber
ingerido un par de cervezas o un antihistamínico sedante; o al contrario,
ofrecerle un impulso como el que daría una bebida energética con cafeína.
Los resultados de este análisis, enfocado en sus efectos calmantes,
comprobaron que sí se logran, y aunque varían de persona a persona, “para
algunos es verdaderamente profundo”, dijo Marom Bikson, profesor de ingeniería
biomédica a Technology Review, del Instituto Tecnológico de
Massachusetts (MIT).
“En cuestión de minutos, se sintieron significativamente distintos, de una
forma en la que no puedo imaginar más que, con un narcótico”, continuó el
encargado de llevar a cabo el estudio. Dicho dispositivo, en el que se
invertirán 13 millones de dólares para comercializarlo, consiste en un conjunto
de electrodos conectados a un teléfono y a su vez, a nervios y músculos
específicos de la cabeza.
Kevin Bullis del MIT probó por sí mismo el aparato, ante lo que reportó que
el efecto tardó unos minutos en llegar, pero después se sintió relajado a lo
largo de un cuatro cuartos de hora más. Y aunque esta innovación de la
neurociencia podría verse como un sustituto del café o de un masaje relajante,
en realidad sus desarrolladores apuntan más a la mejora del tratamiento de
algunos desórdenes psicquiátricos.
Jamie Tyler, profesor de la Universidad Estatal de Arizona dijo “es una
nueva frontera, con un potencial que no ha sido aprovechado todavía”, sobre
todo para lograr cambios en el cerebro sin la necesidad de recurrir a
narcóticos u operaciones.
Por su parte, Amit Etkin, maestro de psiquiatría y ciencia del
comportamiento en la Universidad de Standford, se unió a Tyler para investigar
el impacto que la tecnología puede tener para tratar la depresión, el desorden
de estrés post traumático y los temblores asociados con el Parkinson. Destacó,
además, los beneficios de utilizar tecnologías de ultrasonido para afectar
áreas específicas del cerebro más profundas, como la amígdala, así como de
manera más precisa.
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