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Existen expedientes abiertos relacionados con las Fuerzas Armadas que preocupan a los altos mandos del Ejército
En la oficina de Inspección y Contraloría General del Ejército y Fuerza Aérea, cuyo titular es el general de división Daniel Velasco Ramírez, hay expedientes abiertos que preocupan en los altos mandos de las Fuerzas Armadas y que están relacionados uno, con el pago de 5 millones de dólares por un avión que nunca se entregó; dos, con un contrato de obras por mil 200 millones de pesos para la modernización de la Base Aérea Militar Número 1; tres, con la administración de los recursos conocidos como “autogenerados”, que no es otra cosa más que el manejo del presupuesto y las utilidades generadas en las tiendas y granjas de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena); y cuatro, el proceso que se sigue por el delito de encubrimiento al general de brigada José Luis Castañeda Jiménez, ex subdirector de Adquisiciones del Ejército.
El general secretario Salvador Cienfuegos Zepeda sigue con atención las investigaciones que se llevan a cabo con mucho sigilo; sin embargo, se supo que en el caso del pago de 5 millones de dólares que hizo la Sedena por la adquisición de una aeronave, ésta nunca se entregó al Ejército y en la autorización de la compra fallida estaría involucrado el anterior secretario de la Defensa, general Guillermo Galván Galván.
En la segunda investigación referente al contrato de obra pública 809/2012, otorgado por la Sedena a la conocida empresa Tradeco, cuyo principal accionista es Federico Alberto Martínez Urmeneta, para modernizar la Base Aérea Militar Número 1 Santa Lucía, se solicitó la información por la cancelación de dicho contrato y las sanciones correspondientes; sin embargo, el Comité de Información de la Secretaría de la Defensa Nacional explicó que toda información relacionada con la obra está reservada por un periodo de 12 años, por lo cual será hasta el año 2026 cuando la ciudadanía conozca los malos manejos de Tradeco y Sedena durante el último año de gobierno de Felipe Calderón.
El tercer caso es sobre los recursos autogenerados, rubro opaco en cuanto a su administración se refiere. Un ejemplo es el presupuesto que se destina a la administración de tiendas y granjas y el uso que se le da a las utilidades que obtiene la Secretaría de la Defensa, mismas que hasta ahora no han sido auditadas por autoridad alguna.
En ese sector se trata de 47 establecimientos que van desde las granjas, hasta las tiendas de autoservicio, hoteles, restaurantes y cines, que brindan atención no sólo al personal militar, sino a la población en general. Los establecimientos están diseminados a lo largo del país y son controlados por la Jefatura de Tiendas y Granjas, que encabeza el coronel intendente diplomado del Estado Mayor Ignacio Torres Márquez, y que depende directamente de la Dirección General de Administración, a cargo del general de brigada Fernando Joaquín Ávila.
El dinero que maneja discrecionalmente esta última área por las utilidades que se obtienen del grupo de tiendas y granjas no es menor: de 2007 a abril de 2014, las ganancias ascendieron a 209 millones 870 mil 472 pesos. El detalle de las utilidades se desglosa en tres conceptos: tiendas, granjas y criaderos. Así, en 7 años 4 meses, las primeras generaron recursos por 75 millones 758 mil 312 pesos; las granjas, por 53 millones 620 mil 252, y los criaderos, por 80 millones 491 mil 908 pesos.
El cuarto caso que involucra al general de brigada José Luis Castañeda Jiménez, ex subdirector de Adquisiciones del Ejército en el gobierno anterior, es por los delitos de encubrimiento, coalición de servidores públicos e infracción de deberes comunes a todos los que están obligados a servir en el Ejército, por asignar los contratos directos FAM822/2011 y FAM844/III/B/2011 al hermano de uno de sus subordinados para la compra de refacciones de aviones y helicópteros por más de un millón de pesos. Este proceso penal sigue abierto.
El Ministerio Público Militar cerró el expediente en contra del general en retiro Samuel Lara Villa, a quien había citado en dos ocasiones bajo acusaciones de injurias y difamación, como se dio a conocer en esta columna el pasado 24 de marzo, por publicar artículos en la prensa en donde discrepa sobre la actuación del Ejército mexicano.
Fuente.-El Universal/oficiodepapel@yahoo.com.mx
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