Alfonso Durazo, propuesto por Andrés Manuel López Obrador para la Secretaría de Seguridad Pública, dijo que para el tercer año de la próxima Administración federal, habrá una disminución "significativa" de militares en labores de seguridad en las calles.
Afirmó que la seguridad pública no es una tarea propia de los militares, por lo cual, el enfoque de su dependencia será fortalecer las policías, "apretando tuercas" en materia de corrupción y otorgando beneficios a los policías de carrera.
"La Seguridad Pública es una tarea de carácter civil, es responsabilidad civil, sin embargo, en estos momentos y con los niveles de inseguridad, el Ejército permanecerá en algunas regiones del País, particularmente en aquellas donde el Ejército representa la única presencia del Estado mexicano", dijo.
"Esperamos que a los tres años del Gobierno de López Obrador, se sienta un retiro significativo de las fuerzas militares de las calles".
Dijo que a partir del 1 de diciembre arrancarán un programa de capacitación y profesionalización de policías federales, estatales y municipales para preparar elementos que sustituyan a los militares.
"Consecuentemente iremos retirando paulatinamente al Ejército a los cuarteles en proporción a la capacidad que tengamos para formar policías, cuadros y mandos que entrarán a su relevo".
Policía Federal en lugar del Estado Mayor Presidencial
Cuestionado sobre quién tendrá a su cargo la protección del Presidente Andrés Manuel López Obrador, ante el inminente retiro del Estado Mayor Presidencial a los cuarteles, Alfonso Durazo dijo que la labor será de policías federales.
"Fortaleceremos a un nivel altamente profesional, con estándares internacionales, a la Policía Federal, que convertiremos en policía modelo para el resto de los cuerpos de seguridad en el País, llámense policías estatales o municipales", dijo a modo de respuesta.
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