El asesor principal de la Casa Blanca, Jared Kushner, se reunió con un alto funcionario mexicano vinculado con un cártel de drogas en su reciente viaje a la nación.
El funcionario relacionado con el cártel en cuestión tuvo su campaña parcialmente financiada por empresas del cártel, tuvo su campaña dirigida por un partido político liderado por un exgobernador vinculado con el cártel de Los Zetas, y cayó en controversia cuando el funcionario eliminó una imagen de su Instagram, donde fue visto en un bote con un acusado de ser prestanombre de un cártel de drogas.
Ese funcionario relacionado con el cártel de drogas, el presidente mexicano Enrique Peña Nieto, se reunió con Kushner como parte de una serie de conversaciones con la intención de mejorar las relaciones entre los dos países, en un momento en que las tensiones han aumentado en el comercio internacional, la falta de condiciones de seguridad de México y el muro propuesto entre los dos países. Las tensiones también han aumentado en las negociaciones en curso sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Mientras que la mayoría de los medios de comunicación de Estados Unidos han trabajado para presentar a Peña Nieto de forma positiva debido a su negativa a pagar por el muro, esos mismos medios siguen pasando por alto las crecientes fallas del político mexicano y la narcocorrupción en la élite política del país.
Una serie de investigaciones de periodistas independientes en México revelaron que durante su candidatura a la presidencia en 2012, Enrique Peña Nieto recibió una gran cantidad de dinero inyectado en su campaña por empresarios que han sido denunciados como operadores del Cártel de Juárez.
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El dinero circuló a través de empresas fantasmas y, finalmente, se utilizó para comprar tarjetas de efectivo que se entregaron a cambio de votos. Breitbart Texas informó que el escándalo se conoció como Monexgate; a pesar de la importancia de tales revelaciones, el caso pronto fue olvidado.
El trabajo de preparación para la carrera presidencial de Peña Nieto fue impulsada en gran parte por el ex gobernador del estado de Coahuila, Humberto Moreira, quien encabezó el Partido Revolucionario Institucional (PRI) por un tiempo. Moreira ha sido implicado en casos federales de Estados Unidos por haber sido un subordinado de Los Zetas durante su tiempo como gobernador del estado fronterizo de Coahuila. Varios documentos de la corte de Estados Unidos, publicados por Breitbart Texas revelaron que durante el mandato de Moreira, el cártel conocido como Los Zetas tenía poder ilimitado y protección estatal en Coahuila.
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Los vínculos de Peña Nieto con los cárteles también llegaron a los titulares en agosto de 2017 cuando eliminó una imagen de Instagram que lo mostraba montando en un bote con el famoso narco-músico Julión Alvarez. Si bien la fotografía había sido tomada en el pasado durante una visita al estado de Chiapas, Peña Nieto eliminó la fotografía poco después de que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos nombrara a Álvarez como un prestanombre de un cártel de drogas que operaba en el estado mexicano de Jalisco y congeló sus activos, informó Breitbart Texas.
A pesar de la evidencia que demuestra los lazos del presidente de México con los cárteles de la droga, los mismos grupos criminales transnacionales responsables de hasta 125 mil muertes recientes en su país, los medios de comunicación de Estados Unidos continúan ignorando o haciéndose de la vista gorda por la corrupción. Los medios de comunicación de Estados Unidos rara vez mencionan los vínculos entre dichos cárteles y Peña Nieto, o de la fuerte violencia que ocurre en partes de México.
fuente.-Breitbart/TX
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