El que no aprende que ‘calladito se ve más bonito’ es el subsecretario de Seguridad Pública (perdón, secretario General de Gobierno), HERMINIO GARZA PALACIOS.
Hace algunos meses, lo recordará el lector, tuvo la ocurrencia de quejarse a nivel nacional, en noticiero de ADELA MICHA, de que la alcaldesa de Matamoros, LETICIA SALAZAR VAZQUEZ, “no me toma las llamadas”.
Obvio, fue la burla popular por muchos días.
Ahora sale con que la inseguridad que se vive en nuestro estado, por la cual los delitos del fuero común han aumentado escandalosamente, se debe a que las bandas mafiosas que tienen la pata en el cuello a gobierno y pueblo de Tamaulipas, “están desorganizadas”.
¿Quién le habrá autorizado a decir semejante mamarrachada?
A propósito del buen HERMINIO, es tal su ausencia de la realidad estatal, que varios días después de ocurrido un secuestro frente a su propia residencia llegó a enterarse.
Y no fue un secuestro cualquiera. Le contamos:
El LIC. MARCELINO MAGAÑA, propietario de una universidad privada en esta capital, sufrió el secuestro de su hijo, al que sacaron de su propia residencia, ubicada exactamente frente a donde está la que el gobierno de Tamaulipas le renta a HERMINIO y a la que custodian diariamente no menos de una decena de policías fuertemente armados.
No fue solo el secuestro del menor, sino también el saqueo de la residencia, la que vaciaron en su totalidad.
El muchacho fue devuelto con vida, afortunadamente, previo pago de varios millones de pesos.
Pero de ello se enteró HERMINIO hasta que MARCELINO acudió a Palacio de Gobierno y se lo comentó.
Por supuesto, ni los criminales han sido capturados y mucho menos se recuperó el pago del rescate.
Pero en seguridad “vamos bien y estaremos mejor”, dice EGIDIO, ¿no?
Fuente.-
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