Julián Leyzaola, cursó la licenciatura en Administración Militar, en la Escuela Superior de Guerra, y durante su carrera se desempeñó como subjefe de Estado Mayor de la 44 Zona Militar .
“¡Qué me amenacen a mí esos perros!”, fue la respuesta de Julián Leyzaola a un grupo criminal de esta frontera que ejecutó a uno de sus mandos en 2012. Su postura frente a las bandas delictivas siempre ha sido retadora, poco convencional; dice que él sabe hablarles en el mismo idioma.
La dureza del teniente coronel viene de su formación militar; en su juventud cursó la licenciatura en Administración Militar, en la Escuela Superior de Guerra, y durante su carrera en la Secretaría de la Defensa Nacional se desempeñó como subjefe de Estado Mayor de la 44 Zona Militar, en Oaxaca; así como jefe de la Sección Tercera de Operaciones, de la VI Región Militar, en Puebla.
Tras su retiro de la milicia, fue director de la Policía Estatal Preventiva, director del Instituto Estatal de Policía y ese mismo rango en la dirección de Ceresos, todos en Baja California.
Pese a sus formas duras en prevención del delito, fungió como subsecretario de Seguridad Pública de Baja California, y secretario de Seguridad Pública en Tijuana, cargo que también desempeñó en Juárez.
!!! Salva la VIDA !!!....
El atentado se registró a 24 horas de que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación en la que aparece Leyzaola, ya que en 2012 cuatro agentes a su cargo torturaron y asesinaron a cuatro jóvenes.
El fiscal del estado, Jorge González Nicolás, informó que los tiradores fueron arrestados por agentes de la Policía Municipal a unas cuadras del lugar del ataque; aceptaron su participación, pero aseguraron que desconocían a quién iban a asesinar.
Señalaron que los contrataron para matar a un hombre, pero no les dijeron quién era, sólo les dieron algunas señas del vehículo y dónde localizarlo.
Los detenidos pertenecen a una pandilla y fueron contratados por el crimen organizado, explicó el funcionario, sin revelar a qué grupo se refería.
El teniente coronel Leyzaola a lo largo de su carrera en la administración pública ha generado polémica.
En 2008 fue designado titular de Seguridad Pública en Tijuana, en un momento en que la ciudad atravesaba por una alta incidencia delictiva.
La criminalidad se redujo, pero al término del encargo fue inhabilitado ocho años en Baja California, al comprobársele casos de tortura y violaciones a los derechos humanos. Impugnó la resolución y ésta quedó sin efecto.
De 2011 a 2013 fue secretario de Seguridad Pública en Ciudad Juárez, entonces considerada la urbe más violenta del mundo. Disminuyó la criminalidad, aunque no lo hizo solo, pues trabajó con el estado y federación. En el primer año de gestión despidió a más de 300 elementos por “sospechar” que tenían nexos con el crimen.
Ayer, el alcalde Enrique Serrano informó que una de las balas, calibre .380, llegó hasta la columna vertebral de Leyzaola, mientras que el fiscal de la zona norte, Enrique Villarreal, manifestó que el militar retirado —quien fundó una compañía de seguridad privada— nunca solicitó protección tras el término de su cargo en la policía.
Fuente.-El Universal.
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