La Administración para el Control de Drogas (DEA, en inglés) estaría investigando al dueño del avión en que Jenni Rivera perdería la vida, Christian Eduardo Esquino Núñez, quien, además, tiene otras das aeronaves bajo investigación.
De acuerdo a El Blog del Narco, el propietario fue detenido en 1999 por autoridades mexicanas que señalaron su aportación de drogas, pero fue liberado al día siguiente.
Una fuente de la Procuraduría General de Justicia señala que trabajan con una declaración de un testigo protegido llamado “Jennifer”, el cual relató que Jenni era muy solicitada por “La Barbie” para cantar en sus fiestas.
LA BOMBA
Según las declaraciones de “Jennifer”, en una ocasión Rivera y el anfitrión de la fiesta tuvieron un altercado, causando enojo e indignación por parte de la cantante quien se retiraría del lugar no sin antes lanzar una amenaza.
La reunión habría tenido lugar en diciembre del 2009, meses antes de la detención de Edgar Valdez Villarreal “La Barbie”.
Tras la muerte de Jenni Rivera, en redes sociales corrieron versiones sobre la ejecución de la cantante por parte de un grupo delictivo. Rumores señalaban que Jenni recibió tres advertencias para no presentarse en la Arena Monterrey. Una antes de llegar a Nuevo León; la segunda, horas antes de arrancar el concierto y la tercera durante el espectáculo. Habría sido éste el motivo por el cual “La Diva de la Banda” inmediatamente abandonó la ciudad al finalizar el concierto.
Otros cantantes con fechas pactadas para la Arena Monterrey, habrían recibido amenazas parecidas. Algunas optaron por cancelar sus presentaciones como Juan Gabriel.
Fuentes allegadas a la investigación indican que el responsable de amenazar a los artistas que se presentaran en Arena Monterrey, era el operador principal de “La Barbie”.
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