Entre 2007 y 2014, el crimen organizado ha encabezado 34 ataques a vehículos blindados, ya sea para matar a sus ocupantes o para secuestrarlos.
- Estos ataques causaron la muerte de más de 100 personas, sin embargo, el blindaje y la capacitación de escoltas han hecho que en 80 por ciento de los casos los ocupantes se hayan salvado, señala el primer estudio especializado sobre el tema.
La violencia armada no se detiene en México. Cinco estados del país concentran no sólo las cifras más elevadas de crímenes, tráfico de armas y presencia de cárteles del narcotráfico, sino también los ataques con armas de alto poder en contra de vehículos blindados.
Tamaulipas, Guerrero, Michoacán, Sinaloa y Chihuahua sobresalen como las entidades en las que han ocurrido más ataques contra vehículos blindados de todo tipo y en los que el 80 por ciento de los casos sus ocupantes se han salvado, indica el primer estudio especializado Ataques Balísticos a Vehículos en México, 2010 – 2014, elaborado por expertos de la compañía Pro Rescue MX.
La preparación de los escoltas y del personal que maneja los vehículos blindados, han hecho posible que quienes han sido víctimas de este tipo de atentados logren salir con vida en la mayoría de los casos.
Dicho entrenamiento ha permitido también que en solo dos de cada diez casos de ataque armado se hayan registrado heridos leves, indica el estudio difundido la semana pasada.
El documento revela que entre 2007 y 2014 se registraron a menos 34 ataques contra vehículos blindados pertenecientes a corporaciones policiacas, a dependencias federales y a particulares.
Además, en los 34 ataques analizados por la empresa Pro Rescue MX estuvieron involucrados al menos 63 vehículos(aunque pudieran haber participado más unidades) de los cuales 13 estaban blindados.
Las bases de datos consultadas por Pro Rescue MX señalan que en estos ataques fallecieron 118 personas, hubo 44 heridos y 3 desaparecidos.
Casi todos los ataques se produjeron con armas de alto poder, ocurrieron en rutas de más de ocho kilómetros, duraron al menos cinco minutos y en el 88 por ciento de las agresiones fueron ponchadas una o más llantas, “lo que entorpeció su movilidad y la oportunidad de escapar de sitio de peligro”.
El informe advierte que el 85 por ciento de los ataques a vehículos tienen éxito en el siguiente bajo el esquema de detener al vehículo, hacer que choque, secuestrar al ocupante eliminando al conductor o eliminando a todos los ocupantes.
En el documento se precisan datos de contexto en torno a la violencia creciente y a la necesidad de buscar medidas para protegerse de ataques armados. Se indica que el lugar donde más personas mueren por causas violentas es en la vía pública y en casi todas esas muertes de una forma u otra está involucrado por lo menos un vehículo.
De 2010 a 2014, “se registraron 121 mil 699 defunciones por homicidios y 82 mil 732 fallecimientos por accidentes viales, según datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) y Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes (CONAPRA)”.
Gerardo Corona, director de Pro Rescue MX, señala que existen formas de evitar estos atentados o de escapar de ellos una vez que han iniciado. Para conseguirlo se debe establecer un esquema de seguridad en el que se haga un análisis de riesgo por rutas, así como un perfil del conductor, de los ocuantes y de las personas a proteger.
También se necesitan vehículos con blindajes altos, nivel NIJ III o superior y con dispositivos de alto rendimiento (turbo, frenos, suspensión y runflats inserts).
El operador promedio debe contar con entrenamiento básico para evitar accidentes y realizar acciones evasivas. Para conductores de seguridad, en esos ambientes se debe duplicar la periodicidad de los entrenamientos y ajustarlos a condiciones cada vez más reales, agrega el informe.
Fuente.-#Jorgemedelllin95
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