Ahora que está muy de moda abandonar el barco tricolor llamado PRII, los de Morena aprovechan para reclutar a los más “inn” de este organismo político al que se le achacan todos los males de la nación. Pero brincar de un partido a otro por supervivencia no es nada nuevo.
Andrés Manuel López Obrador, líder moral, fundador y dirigente todo poderoso del Movimiento Regeneración Nacional, vistió la casaca del Partido Revolucionario Institucional, luego pasó a vestir la del PRD hasta que Peña Nieto le avaló la marca de su partido Morena el 9 de junio de 2014. Dicho registro otorgado por el presidente de la República, dicen algunos que fue el primer paso camino a la presidencia de México.
En Morena, un instituto relativamente nuevo pero con personajes de antaño como el mismo Ricardo Monreal, ex militante del PRI, PRD, PT, MC y hoy fiel de Obrador, tiene más claro su papel en la elección de 2018 donde aseguran ahora si nada, ni nadie los va a detener.
Monreal, tal parece que no va a contender por el lugar que hoy tiene Miguel Ángel Mancera, ya que Andrés Manuel lo tiene ocupado en la captación de políticos tamaulipecos de cierto arraigo tricolor como es:
Felipe Garza Narváez, dos veces ex diputado local y ajustador de medios de comunicación del último candidato del PRI a la gubernatura de Tamaulipas; Javier Villarreal Terán, ex secretario de Turismo en el sexenio de Eugenio Hernández Flores y reconocido político de la zona sur del estado; Óscar Lubbert, ex alcalde de Reynosa y personaje conocedor de la operación política en la frontera norte de Tamaulipas, su esposa María Esther Camargo es actualmente legisladora federal por el PRI; Jaime Rodríguez Inurrigarro, ex colaborador de Tomás Yarrington y del mismo Hernández Flores sabe jugar a la perfección en la oscuridad de las tinieblas, su visión nocturna lo hace salir siempre liberado de todo pecado, este es un animal político al que aún se le puede aprender mucho; Jesús Suárez Mata, afín a la corriente petrolera del actual diputado federal del PRI Esdrás Romero Vega, es otro que coquetea con los de Morena; Pedro Zaleta, abogado altamirense que ha sido oposición al sistema tamaulipeco, también está en la lista de intereses e interesados en afiliarse al partido del Peje; el amado y querido "oso" Luis Humberto Hinojosa Ochoa, operador político por el lado magisterial ya tiene casi los dos pies fuera del PRI tamaulipeco y es que todos estos y otros no menos importantes sostuvieron una reunión extensa e interesante -según sus individuales intereses- con Ricardo Monreal "el zacatecano", apenas este sábado pasado en un hotel de la jungla de asfalto, ahora llamada Ciudad de México. Sí, Monreal el "cazatalentos" de Andrés Manuel en Tamaulipas los escuchó y habló fuerte para que reaccionen y se sumen al partido de la esperanza.
Fue un debate interesante en el que los tamaulipecos lograron aguantar el castigado y acalorado discurso de Ricardo Monreal pues les dejó muy claro cómo se ven los políticos tamaulipecos desde el exterior del estado, con palabras elegantes y diplomáticas prácticamente les dijo de agachones no pasan, ya que desde Los Pinos, entregaron Tamaulipas al Partido Acción Nacional y nadie dijo nada, les metieron una oposición hasta por los ojos que ahora los tiene sumidos en la vergüenza, estos accedieron y reconocieron la hipótesis de la entrega tamaulipeca, sin embargo, conocedores del tema fortalecieron en diálogo la proyección de Morena para Tamaulipas en la que cada una de sus regiones merece soluciones y discursos específicos, pues Lubbert en Reynosa, no puede interferir en Matamoros y Nuevo Laredo, otros dos municipios fronterizos; el "Javo" Villarreal, aunque lo conozcan en la costa, tampoco puede manejar más allá de su zona cañera en la que ha servido desde la alcaldía; lo mismo con la gente de Esdras, perdón del "güero" Suarez Mata que opera en Ciudad Madero; en contexto respetar liderazgos y afinar diálogos siempre respetando el desempeño de las Fuerzas Federales, son tips que compartieron los tamaulipecos con el ex gobernador de Zacatecas a quien Ernesto Zedillo, quiso vencer a través de Andrés Manuel, pero López Obrador, no se dobló, ni se venció ante el entonces presidente de México a quien además le respondió con una amenaza, ya que si Ernesto se aventuraba a no reconocerle el triunfo de Monreal en Zacatecas, le incendiarían al estado por lo que finalmente Ponce de León, no tuvo más opción que aguantar y reconocer al triunfo de Andrés Manuel y Monreal juntos, esta fue una anécdota que se compartió para que vieran la calidad de Andrés Manuel, el próximo líder de esta bola de priístas o ex priístas.
Fuente.-davidcastellanost@hotmail.com
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