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viernes, 22 de agosto de 2025

“OMISA,SESGADA e INCONSISTENTE”: “SHEINBAUM NOS DIO BUENA NOTICIA en MATERIA de ECONOMIA pero al ESTILO CUATRERO”….las letras chiquitas también cuentan.


Al destacar el “récord” de inversión extranjera directa en el segundo semestre de este año, la Presidenta Claudia Sheinbaum dijo que ni los aranceles pudieron con la economía mexicana.

Durante la apertura de su mañanera, Sheinbaum dio la “buena noticia” que le mandó ayer la Secretaría de Economía.

Leyó la tabla colocada en las pantallas de la mañanera llamada “Máximo histórico en inversión extranjera directa”, que muestra que en el segundo trimestre de 2025 fue de 34 mil 265 millones de dólares, mientras que el mismo periodo del año pasado fue de 31 mil 096 millones de dólares y en 2017 había sido de 15 mil 645 millones.

“(En) 2025 histórica la inversión extranjera directa en México, ni los aranceles pudieron con la economía mexicana”, presumió la Mandataria mexicana.

“Son 34 mil 265 millones de dólares, en 2025, supera los 31 mil 096 del 2024, que ya había sido récord, y es prácticamente más del doble del 2017”.

Validación de información

Los datos ofrecidos por la presidenta Claudia Sheinbaum sobre la inversión extranjera directa (IED) en el segundo trimestre de 2025 son consistentes con los reportes oficiales y medios nacionales:

  • Cifra reportada: 34,265 millones de dólares para el segundo trimestre de 2025, lo que supone un aumento del 10.2% respecto al mismo periodo de 2024, cuando la IED fue de 31,096 millones de dólares. Comparado con 2017 (15,645 millones), representa más del doble.

Sesgo en la narrativa

  • Discurso triunfalista: El mensaje de la presidenta enfatiza que “ni los aranceles pudieron con la economía mexicana”, presentando la IED como imagen directa del éxito del modelo de la 4T, y contraponiendo los resultados a los “mitos del oscurantismo neoliberal”.
  • Selección de referencias históricas: Usar 2017, un año con baja IED, ayuda a maximizar la percepción de crecimiento. Este es un recurso comunicativo frecuente para destacar avances sin tener en cuenta los ciclos económicos o la excepcionalidad de ciertos años, como las fuertes inversiones de tipo extraordinario (fusiones, compras de activos puntuales etc.) que pueden distorsionar la serie histórica.
  • No distingue composición: La presidenta no aclara el tipo de IED recibido. Expertos advierten que parte relevante puede deberse a reinversión de utilidades o movimientos contables (por ejemplo, reestructuración de empresas transnacionales o compra-venta de filiales) más que a inversión nueva y productiva. Esta distinción es clave para evaluar el verdadero impacto económico.

Inconsistencias u omisiones

  • Relación con empleo y distribución: No se menciona si el récord en IED se refleja en generación de empleos de calidad, ni en una distribución territorial o sectorial equitativa, algo que especialistas consideran relevante para entender el beneficio real para la población.
  • Contexto externo: No se reconoce el impacto del “nearshoring” global y la relocalización de cadenas productivas, que benefician a México por factores externos, no sólo por méritos de la política interna.
  • Impacto de aranceles: Es cierto que hubo amenazas y episodios de aranceles desde EE.UU. Sin embargo, el análisis de expertos suele advertir que la mayoría de la IED corresponde a reinversión y servicios, menos afectados por barreras arancelarias directas. El dato se utiliza selectivamente para resaltar resiliencia, cuando lo fundamental es la competitividad estructural y la integración productiva regional.
  • Inflación y salarios: El mensaje presidencial vincula la falta de inflación a aumentos del salario mínimo y al éxito de la IED, pero la correlación no necesariamente implica causalidad, sobre todo porque la inflación depende de factores globales, comportamiento del peso y precios internacionales, no solo de la política salarial.

¿Es engañosa la narrativa?

  • No es falso el récord de IED reportado. Sin embargo, es una lectura interesada y parcial:
  • No destaca los factores internacionales y coyunturales que influyen más que la acción del gobierno.
  • Selecciona datos históricos favorables y omite años atípicos, lo que puede ser engañoso.
  • Relaciona de manera simplista cifras macroeconómicas con bienestar general, minimizando los desafíos persistentes en distribución, salarios reales y desarrollo regional.
  • Ignora el ritmo inflacionario internacional y los ajustes fiscales que influyen en el ambiente macroeconómico.
  • El sesgo es evidente: Se utiliza la cifra positiva como argumento político, asociándolo directamente a las políticas de la 4T y descalificando las advertencias de modelos anteriores, en vez de promover un análisis complejo, multifactorial y autocrítico del fenómeno.

En resumen, la cifra es correcta y verificable, pero el relato presidencial la acompaña de simplificaciones y omisiones para fortalecer un posicionamiento político, sin matizar adecuadamente las causas, composición y alcances reales del crecimiento en inversión extranjera.

Con informacion: ELNORTE/

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