En Monterrey, la madrugada de ayer tuvo su propio espectáculo clandestino. Un grupo de creativos del delito decidió abrir un boquete en la pared de un negocio de “maquinitas de cascada”, esos templos del vicio que en todo el pais opera la delincuencia organizada y que las autoridades en extremo corruptas no ven,y se llevó 250 mil pesos.
El escenario: un local de nombre tan ostentoso como “La Original Cascada Millonaria”, ubicado nada menos que en el corazón de la ciudad, entre Juárez y Matamoros. Un lugar que, por lo visto, opera en esa nebulosa legal donde nadie es culpable y todo el mundo mira hacia otro lado. Porque, seamos claros, las “maquinitas de monedas” están prohibidas. Pero ahí estaban, iluminando con sus focos de neón el vacío de la ley.
El robo, dicen, fue quirúrgico. Los ladrones entraron por otro establecimiento, perforaron la pared como quien cava un túnel al tesoro y salieron con una bolsa cargada de efectivo. Solo lo reportaron hasta las 11:30 de la mañana, cuando ya el dinero debía estar más lejos que la indignación de las autoridades.
El detalle más sabroso lo agregó la fuente policial: tal vez uno de los ladrones era cercano al negocio. En resumen, ladrones robando a ladrones, una escena que pinta de cuerpo entero la cadena alimenticia del delito urbano.
Pero el verdadero boquete no fue en la pared: está en la vista de las autoridades. Un sitio ilegal operando a plena luz del día, sin intervención federal, y un robo que ocurre sin que nadie sospeche nada hasta media mañana. En el país donde la impunidad tiene sucursales, el crimen se volvió rutina y la justicia, personaje secundario.
Juegos de azar y permisos
El negocio de maquinitas de cascada, viola de entrada la legislación federal de juegos y sorteos y, muy probablemente, también normas administrativas y penales relacionadas con apuestas clandestinas y uso de efectivo ilícito.
- La Ley Federal de Juegos y Sorteos prohíbe en todo el país los juegos de azar y juegos con apuestas, salvo los expresamente permitidos y siempre con permiso de la Secretaría de Gobernación.
- Esta misma ley prohíbe que opere cualquier local donde se realicen juegos con apuestas sin contar con un permiso expreso de la SEGOB, lo que coloca a las “maquinitas” callejeras automáticamente en la categoría de juego ilegal.
Máquinas tragamonedas prohibidas
- El Reglamento de la Ley Federal de Juegos y Sorteos establece de forma directa que las máquinas tragamonedas, en cualquiera de sus modalidades, están prohibidas en México,tan asi,que las han decomisado por cientos en Sinaloa.
- Se considera máquina tragamonedas cualquier aparato donde el usuario introduce dinero o equivalente para hacer una apuesta con la finalidad de obtener un premio, justo el esquema de las “maquinitas de cascada”.
Juego ilegal y posibles delitos
- La propia Dirección General de Juegos y Sorteos clasifica como juego ilegal a toda operación de juegos con apuesta o sorteos sin permiso, lo que puede derivar en aseguramiento de máquinas, clausura del local y sanciones administrativas y penales para propietarios y operadores que suelen ser controlados por Carteles.
- Diversos criterios señalan que quienes albergan estas máquinas en locales abiertos o cerrados pueden enfrentar multas elevadas y penas de prisión, además de investigaciones por uso de recursos de procedencia ilícita si se vinculan a redes de criminalidad organizada.
Omisiones y ceguera de autoridad
- Al tratarse de una actividad federalmente regulada y expresamente prohibida sin permiso, la operación abierta de estas “maquinitas” en pleno centro urbano revela omisión o tolerancia de autoridades municipales, estatales y federales encargadas de supervisar giros y comercio establecido.
- El hecho de que el negocio esté en zona céntrica y opere de forma continua pese al marco legal sugiere no solo ceguera oficial, sino posible protección informal o, mínimo, una negligencia sistemática en la aplicación de la Ley Federal de Juegos y Sorteos y su reglamento.
Con informacion: ELNORTE/
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