«JUECES o ARQUEOLOGOS ?»: «MINISTROS CUATREROS DISCUTEN INSTAURAR KARAOKE JUDICIAL para VOLVER a CANTAR RESOLUCIONES YA JUZGADAS pero con OTRO TONO JUDICIAL»…segun convenga al calendario politico.

Ayer miércoles las ministras allegadas a la 4T se confrontaron en sesión pública al debatir si es posible que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) reabra asuntos a pesar de que exista sentencia firme bajo el concepto de “cosa juzgada fraudulenta”.

El caso que dio origen al debate fue el amparo directo en revisión 6585/2023 cuyo proyecto de resolución establecía la improcedencia de una acción de nulidad de juicio concluido, regulada en el Código de Procedimientos Civiles para la Ciudad de México aplicado porque el Código de Comercio no contempla este tipo de procesos.

Que esta pasando

En la Corte ya no saben si son jueces o arqueólogos. A fuerza de cavar en viejos expedientes, han terminado desenterrando la mismísima “cosa juzgada”, ese fósil jurídico que solía significar: “ya está resuelto, punto final”. Pero no. En el nuevo orden togado, hasta lo inamovible se puede mover… siempre que convenga al calendario político.

Los ministros y ministras del siglo XXI parecen fascinados con la idea del “volver a juzgar lo juzgado”. Uno diría que están ensayando una secuela: *Sentencia II – El Regreso de los Fallos*. Entre discursos solemnes y juramentos de independencia, algunos hablan de “segundas lecturas”, mientras otros temen que esto se vuelva una especie de karaoke judicial donde cualquiera puede volver a cantar la misma resolución, pero con otro tono.

Todo ocurre mientras los pendientes —reales, urgentes, humanos— siguen apilados en los escritorios. Sin embargo, el ojo supremo de la justicia mexicana prefiere la mirada al espejo: revisar su propio pasado, sus antiguos aciertos o metidas de toga. Dicen que es por pureza jurídica; parece más bien una terapia grupal del Poder Judicial.

Así, entre discursos de “integridad institucional” y leves insinuaciones de venganza togada, la Corte se convierte en escenario de un déjà vu judicial. Porque si algo tiene esta nueva época es la obsesión por revisar el expediente… incluso cuando el expediente ya cerró con sello, cinta y polvo encima. 

Con informacion: PROCESO/