La zona rural de Sinaloa volvio a convertirse en el escenario de un macabro hallazgo ,que no solo refleja la crisis de desapariciones en Sinaloa,deja ver que las cifras de asesinatos oficiales 1,141 desde el inicio de la guerra de bandos de la misma banda, van de la mano de la cifra de desaparecidos en un pais donde ser levantado equivale casi a morir,lo que presume que la estadística del gobierno para contabilizar muertos y reducción de cifras,es totalmente errónea,cuando aparecen cuerpos y los contabiliza por separado.
Lo que comenzó con un reporte anónimo terminó en el descubrimiento de once cuerpos en siete fosas clandestinas, un número que podría aumentar conforme avancen las investigaciones.
La Búsqueda que Reveló el Horror en Mezquitillo
El colectivo Sabuesos Guerreras A.C. venía siguiendo una pista desde hace una semana, tras recibir una llamada anónima que alertaba sobre la posible presencia de restos humanos en el ejido Mezquitillo, sindicatura de Costa Rica, en Culiacán. Sin embargo, por cuestiones de seguridad, no habían podido acudir al lugar hasta este martes 22 de abril, cuando finalmente consiguieron el acompañamiento de las autoridades.
“Nos habían reportado que había un cuerpo enterrado, y ya van 11”, relató María Isabel Cruz, presidenta del colectivo, quien busca incansablemente a su hijo Reyes Yosimar García entre las tierras removidas de Culiacán. Lo que encontraron superó por mucho sus expectativas: algunos cuerpos estaban tan expuestos que apenas necesitaron usar palas para descubrirlos, con miembros que sobresalían de la tierra. “Una pierna que sobresale de un montón de polvo, allá una mano sin cuerpo”, describió Cruz sobre el escalofriante panorama.
El hallazgo ocurrió en una zona descrita como un verdadero “panteón clandestino” que, según testimonios del colectivo, ha funcionado como tiradero de cuerpos durante años. Los restos humanos presentaban diferentes estados de descomposición; algunos eran “puro hueso”, mientras otros mantenían tejidos frescos, lo que sugiere diferentes temporalidades en los enterramientos.
Un Operativo Interinstitucional sin Precedentes
La magnitud del hallazgo motivó un despliegue coordinado entre diversas instituciones. El operativo contó con la participación de familiares de desaparecidos, peritos forenses, personal del Servicio Médico Forense (Semefo), agentes investigadores, elementos del Ejército Mexicano, Guardia Nacional y policías estatales y municipales, quienes resguardaron el perímetro durante las excavaciones.
Belinda Aguilar, integrante de Sabuesos Guerreras, explicó que la búsqueda fue posible gracias a la colaboración interinstitucional: “Esta búsqueda se realizó a base de una denuncia anónima que nos llegó a nosotros. Optamos por pedir el apoyo de la Comisión Estatal de Búsqueda y de las demás instituciones de gobierno y seguridad”.
Karina Elizabeth Márquez, titular de la Comisión Estatal de Búsqueda, destacó la importancia del trabajo realizado por el colectivo: “La Comisión reconoce y valora profundamente la labor incansable de Sabuesos Guerreras, así como la colaboración de las familias que, con valentía y esperanza, participan en estas acciones orientadas a la búsqueda de personas desaparecidas”.
El Contexto de Violencia en Sinaloa
Este macabro hallazgo ocurre en medio de una escalada de violencia en Sinaloa, atribuida a un conflicto entre facciones del Cártel de Sinaloa, conocidas como Los Chapitos y Los Mayos, que ha dejado un rastro de sangre y desapariciones desde septiembre de 2024.
Según datos oficiales de la Fiscalía General del Estado de Sinaloa, de septiembre al 21 de Abril,publicados por Noroeste,se han registrado 1,141 homicidios dolosos en la entidad y en el mismo periodo, 1,306 desapariciones, de este nivel la incontenible barbarie provocada por el CDS y la Irresponsabilidad del gobierno.
Sin embargo, el colectivo Sabuesos Guerreras estima que la cifra real podría ser mucho mayor, situándola entre 2,200 y 2,500 casos de desaparición desde que comenzó el conflicto entre las facciones del cártel[,lo que coincidiría con una suma de muertos que avanza a 3,000. Esta disparidad entre cifras oficiales y estimaciones de colectivos ciudadanos es un patrón que se repite en todo el país.
México: Un País de Fosas Clandestinas
El hallazgo en Culiacán se suma a una serie de descubrimientos similares en otros estados mexicanos durante la misma semana. En Colima fueron encontradas seis fosas con restos humanos el lunes 21 de abril; en Baja California Sur, otras siete fosas vieron la luz recientemente, con cinco cuerpos exhumados en las afueras de La Paz.
Iris Manríquez, fundadora del colectivo Búsqueda x La Paz, relata una historia similar a la de Culiacán: las buscadoras sabían desde hace años, por pistas anónimas, que las cunetas de la carretera de San Juan de la Costa escondían desaparecidos.
En septiembre del año pasado encontraron los primeros restos: 17 personas en 12 fosas distintas, que habían estado enterradas desde 2016[1]. En febrero de este año, desenterraron 22 cuerpos más en otro tramo de la misma carretera, abandonados allí en 2018.
El último esfuerzo oficial para contabilizar las fosas clandestinas en México data de 2023, cuando la Secretaría de Gobernación publicó un mapa que registraba 5,698 fosas en todo el territorio nacional y donde Tamaulipas ocupa un lugar deshonrosamente destacado. Desde entonces, el número no ha dejado de crecer.
El Proceso de Identificación y el Dolor de las Familias
Los restos encontrados en el ejido Mezquitillo serán trasladados al Servicio Médico Forense (Semefo), donde se realizarán análisis forenses y pruebas genéticas para su posible identificación. Belinda Aguilar ha hecho un llamado a las familias con seres queridos desaparecidos para que acudan al Semefo una vez que se hayan procesado las fosas, ya sea para identificación a través de prendas o mediante pruebas de ADN.
El trabajo de los colectivos como Sabuesos Guerreras va más allá de la búsqueda física. Como explica su misión oficial, buscan “brindar apoyo moral a los familiares de personas desaparecidas para hacerles saber que no están solas en este proceso, brindándoles acompañamiento en trámites y búsquedas”.
Las Labores Continúan
La zona de Mezquitillo permanece bajo resguardo mientras continúan las labores de recuperación. Las autoridades no descartan encontrar más restos humanos conforme avancen los trabajos, considerando la extensión del terreno y los indicios encontrados.
El colectivo Sabuesos Guerreras ha señalado que, aunque este hallazgo es significativo, existen muchos otros posibles panteones clandestinos que no han podido explorar debido a la inseguridad y al conflicto entre cárteles. “No descartamos que pudiera haber más en este lugar y sabemos la existencia de este tipo de lugares así, pero ahorita por la inseguridad y el tema que hay de la pugna que hay entre los cárteles no podemos salir a buscar”, explicó Belinda Aguilar.
Este descubrimiento en Culiacán vuelve a poner en evidencia una crisis humanitaria que parece no tener fin en México. Mientras las autoridades continúan con su labor, miles de familias siguen esperando respuestas sobre el paradero de sus seres queridos desaparecidos, en un país donde la tierra sigue revelando sus macabros secretos.
Con informacion: NOROESTE/MEDIOS
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