El gobierno de Claudia Sheinbaum presumió que en el periodo de octubre a diciembre de 2024, correspondiente a los primeros 100 días de su administración , se registró una disminución de 16.3% en el promedio diario de víctimas de homicidio doloso. Esto, al pasar de un promedio de 87 víctimas en septiembre, a uno de 72.8.
Sin embargo, al revisar las cifras consolidadas presentadas por la titular del Secretariado Ejecutivo, Marcela Figueroa, se obtiene que en 2024 hubo un total de 30 mil 057 asesinatos, y en 2023 fueron 29 mil 713, según el mismo indicador. Es decir, hubo un aumento de 1.16%.
En cuanto al periodo octubre-diciembre, los homicidios subieron 2.95%. De acuerdo con una revisión de datos de El Sabueso, octubre pasó de 2,406 el año anterior a 2,570 víctimas en 2024; noviembre de 2,351 a 2,461; mientras que en diciembre sí hubo una reducción al pasar de 2,322 a 2,257. Esta última cifra, calculada a partir del promedio presentado para ese mes.
Interpretation sesgada
La interpretación sesgada de las cifras de homicidios por parte del gobierno de Claudia Sheinbaum es un claro ejemplo de manipulación estadística para presentar una imagen favorable de su gestión. Aunque se presume una disminución del 16.3% en el promedio diario de víctimas de homicidio doloso durante los primeros 100 días de su administración, esta afirmación es engañosa por varias razones:
- Selección arbitraria del periodo de comparación: Al comparar septiembre con diciembre, se elige un periodo corto y específico que no refleja la tendencia general del año. Este es un claro ejemplo de “cherry-picking” o selección sesgada de datos.
- Ignorar el aumento anual: Se omite mencionar que el total de homicidios en 2024 (30,057) fue mayor que en 2023 (29,713), lo que representa un aumento del 1.16%. Este dato contradice directamente la narrativa de mejora en seguridad.
- Uso de promedios diarios en lugar de cifras totales: Al presentar promedios diarios, se diluye la percepción del número total de víctimas, que sigue siendo alarmantemente alto.
- Falta de contexto histórico: No se proporciona una perspectiva a largo plazo que permita evaluar si la supuesta mejora es significativa en el contexto de los últimos años.
- Concentración geográfica ignorada: Se omite mencionar que el 49.4% de los homicidios se concentran en solo siete entidades, lo que sugiere que el problema de violencia sigue siendo crítico en ciertas regiones.
- Énfasis selectivo en reducciones: Se destacan las disminuciones en ciertos delitos, pero se minimiza el aumento en homicidios, que es uno de los indicadores más importantes de seguridad.
- Uso de cifras preliminares: Las estadísticas presentadas son preliminares y podrían ajustarse al alza una vez que se consoliden los datos.
Esta manipulación estadística es preocupante porque:
- Distorsiona la percepción pública de la situación de seguridad.
- Puede llevar a decisiones de política pública basadas en información sesgada.
- Socava la confianza en las instituciones gubernamentales y en la transparencia de la información oficial.
Para una evaluación más honesta y útil, sería necesario:
- Presentar datos en su contexto completo, incluyendo tendencias a largo plazo.
- Usar tasas por población en lugar de números absolutos para comparaciones más precisas.
- Ser transparente sobre las limitaciones y posibles sesgos en los datos.
- Fomentar un análisis independiente y crítico de las estadísticas de seguridad.
En resumen, aunque puede haber una variación en las cifras que no equivalen a mejoras permanentes , la presentación sesgada de los datos por parte del gobierno de Sheinbaum parece ser un intento de construir una narrativa de éxito que no se corresponde plenamente con la realidad de la situación de seguridad que perciben los ciudadanos en México.
Con informacion: ANIMAL POLITICO/MEDIOS
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