Para concluir su relación laboral, cada uno de
los 500 diputados se embolsó casi dos millones de
pesos, correspondientes a dietas (salario), ahorros, subvenciones y
prestaciones de ley.
Los legisladores que dejaron oficialmente este 31 de
agosto el Palacio Legislativo de San Lázaro ya cobraron esta cantidad
millonaria, la cual alcanzó la cifra total de casi mil millones de pesos,
recursos provenientes del erario público.
Estos recursos que son parte de una serie de
beneficios exclusivos de los legisladores y están desagregados de la siguiente
manera: un total de 148 mil 558 pesos de remuneración mensual a cada uno,
correspondiente a la dieta, asistencia legislativa y atención ciudadana.
Cada de uno de los 500 diputados también tuvo derecho
a 93 mil 699 como parte proporcional del aguinaldo, que de acuerdo con la ley
corresponden a 40 días al año.
A estas cifras hay que sumarle 2 mil 780 pesos de
vales de despensa; más 900 mil pesos de fondo de ahorro para cada uno y una
cantidad similar por concepto de subvenciones ordinarias y extraordinarias.
La parte de las subvenciones, una de las prebendas más
onerosas que tienen los diputados, la cual no están obligados a transparentar,
que se entrega a cada uno de los coordinadores parlamentarios y cada uno de los
líderes lo gasta como quiere, es el resultado de los cálculos realizados a los
“informes de origen y destino de los recursos económicos asignados por la
Cámara de Diputados”, los cuales están disponibles en la página web de San
Lázaro.
Según estos cálculos, los grupos parlamentarios
recibieron en la recta final de la legislatura (marzo-agosto) por concepto de
subvenciones casi 570 millones de pesos.
Guardadito
Los diputados también gozan de un beneficio extra para
que sus fondos de ahorros, al final de legislatura, se dupliquen. Se trata de
la posibilidad de que cada legislador ahorre hasta el 12 por ciento de sus
remuneraciones mensuales.
Este porcentaje ahorrado mensualmente tiene un
beneficio importante para el legislador de cualquier grupo parlamentario: la
Cámara de Diputados duplica el monto ahorrado y lo entrega al final de
cada legislatura.
Es decir, si un legislador decide ahorra hasta 12 mil
pesos mensuales, al final de los tres años de legislatura su ahorro, ya con la
cantidad duplicada por parte de la Cámara de Diputados, puede ser superior a
los 900 mil pesos.
La cantidad final dependerá del porcentaje que el
representante popular haya decido ahorrar desde el inicio de la legislatura.
Los apoyos adicionales
Con independencia a las dietas, ahorros,
subvenciones y prestaciones de ley, el diputado federal mexicano también cuenta
con otro tipo de ayuda legislativa, como el caso de boletos de avión (cuatro
ida y vuelta en los meses de sesiones ordinarias), vales para gasolina, con su
tarjeta IAVE para no pagar casetas de peaje, vales para comer durante los días
de sesión y automóvil, aunque no todos los diputados tiene este beneficio.
Tampoco están consideradas sus oficinas y mobiliario,
así como el ejército de empleados y asesores.
Contingencias
Los beneficios de los legisladores salientes, se
extendieron para los nuevos inquilinos del Palacio Legislativo de San Lázaro,
pues sus ex colegas les dejaron un “colchón” de 150 millones de pesos,
etiquetados para “contingencias”.
Incluso, este recurso está aprobados de hace un año en
el presupuesto 2015, por lo que ya pueden hacer uso los nuevos legisladores
federales del millonario recurso.
Hace dos legislaturas, los diputados federales se
embolsaron casi mil millones de pesos correspondientes a dietas (salario),
ahorros, subvenciones y prestaciones de ley.
fuente.-Lasillarota.
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