Codigo Magenta publica hoy otra de esas historia que chorrean, escurren pudricion humanista trasformadora: el chofer de “Andy” López Beltrán, convertido en el nuevo zar de los contratos millonarios de Pemex. Javier Núñez López —sí, el mismo que antes movía el volante— pasó a mover miles de millones de pesos cuando la “Familia Real de la Cuarta Transformación” se instaló en Palacio Nacional.
Con esa suerte que sólo otorga la amistad presidencial, Núñez firmó un dulce negocio sin licitación, en lo oscurito y con moño dorado: un contrato de 15 mil millones de pesos para rentar un barco durante diez años. ¿El ganador? Una vieja conocida del pantano petrolero: Blue Marine, reciclada bajo el nombre de BME SUBTEC, porque en la 4T basta cambiarle el nombre al villano para que se convierta en héroe.
Lo irónico es que López Obrador padre había condenado a Blue Marine como parte de la “Mafia del Poder”, pero una vez instalado en el trono, la empresa pasó de villana a consentida. El milagro tuvo nombre de familia: Daniel Asaf Manjarrez, jefe de la Ayudantía del presidente, compadre de Andy y primo del director de Blue Marine, Emiliano Pescador Asaf. Todo queda en familia, literalmente.
El contrato, firmado en 2023, garantiza que este buque dorado seguirá navegando hasta 2033, pasando por el gobierno de Claudia Sheinbaum y por el de quien venga después. No está mal: un mismo contrato que sobrevivirá a dos sexenios gracias a la amistad y la sangre.
La cereza del pastel: el barco que rentaron, según técnicos de Pemex, apenas sirve para justificar semejante monto. Pero, claro, en la 4T el sobreprecio también se llama “justicia social”.
Así se hunde la promesa de “no robar, no mentir, no traicionar al pueblo”. En el naufragio de la moral obradorista, flotan felices Andy, Asaf, Herrería… y un barco de 15 mil millones de pesos, símbolo de que la transformación también puede ser un buen negocio.
Con informacion: CODIGO MAGENTA/
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