Visitanos tambien en:

sábado, 27 de septiembre de 2025

«QUIEREN PRUEBAS ?»: «DIPUTADA MORENO-MAYITA ARROPADA por SHEINBAUM anduvo PASEANDO IMPUNIDAD en EVENTO de la PRESIDENTA LLENO de ACARREADOS en BC»…vestida de rosa chillante y bailando con descaro al ritmo de “La Chona”.


La escena fue puro surrealismo político a la mexicana: mientras en Estados Unidos la señalan por sus presuntos amarres con La Mayiza, facción del Cártel de Sinaloa, la diputada morenista Araceli Brown desfiló como estrella de feria en el informe de la presidenta Claudia Sheinbaum en Baja California. Vestida de rosa chillante, bailando con descaro al ritmo de “La Chona” y mandando besos a la prensa que la increpaba, Brown pareció más preocupada por posar que por las acusaciones que la tienen en la mira del Departamento del Tesoro.

El contraste brutal

Mientras los reflectores se los robaba la legisladora sancionada por Washington, la presidenta Sheinbaum llegó con 45 minutos de retraso, tiempo que aprovecharon las huestes locales de Morena para placearse y lanzarse veladas precandidaturas. Julieta Ramírez, Armando Ayala y Jaime Cantón jugueteaban con los micrófonos y los reflectores, como si fuera pasarela rumbo al 2027, mientras los adultos mayores eran acarreados en masa para llenar el auditorio.

El acarreo disfrazado

Camiones repletos con logotipos de municipios y de la línea transportista ABC dejaron en claro que el acarreo sigue siendo la gasolina política de los eventos morenistas como lo fueron en el segundo pisos. Decenas de colonos, algunos resignados, otros molestos, llegaron bajo el sol, muchos de la tercera edad, con sillas de ruedas listas para la pasarela gubernamental. “Venimos porque nos trajeron, pero lo que queremos es pavimentación y drenaje en la colonia”, soltó una vecina de Mexicali, desnudando el vacío detrás de la coreografía política.

El muro invisible

El enojo ciudadano tampoco logró escalar al escenario. Quien quisiera protestar fue advertido de que no entraría con lonas ni megáfonos cerca del auditorio blindado. Así, la supuesta cercanía de Morena con “el pueblo” quedó encerrada tras un cerco logístico donde todo estaba controlado, salvo quizá la ironía de ver a Brown —una legisladora bajo sospecha de vínculos criminales— pavonearse con descaro frente a Sheinbaum, que hace unos días pidió “más pruebas” sobre las pruebas de sus presuntos nexos como si fuera su abogada y lo es.

Contrato millonario entre amigos narcos

La impunidad en modo VIP y a pleno sol en Baja California: mientras la diputada morenista Araceli Brown –señalada por el mismísimo Departamento del Tesoro de Estados Unidos por operar en tándem con “La Mayiza”, facción del Cártel de Sinaloa– bailaba y coqueteaba con la prensa en el informe de Claudia Sheinbaum, las pruebas de sus vínculos con el narco le hacían segunda en la pista. Porque sí, pruebas hay, y no son chismes de pasillo: son contratos millonarios firmados de puño y letra, adjudicaciones directas y fotos oficiales que retratan la desvergüenza mejor que cualquier selfie rosa.

Hablemos claro: durante su tiempo como alcaldesa de Rosarito (2021-2024), Araceli Brown mandó adjudicar un contratito por casi 12 millones de pesos a Candelario Arcega Aguirre, otro de los grandes señalados por la OFAC como operador financiero del Cártel de Sinaloa. 

El pretexto fue la compra de camionetas Dodge Ram para la Secretaría de Seguridad Ciudadana, pero lo que salta es la firma estampada de Brown junto a la de Arcega, en un proceso sin licitación y con el mínimo pudor legal. Todo bien blindado: dos pagos, fianzas de papel y garantía de agencia, como si las reglas fueran simple “sugerencia”.

Expediente OFAC y UIF: no son teorías

Mientras ella se dice “sorprendida” , el Departamento del Tesoro gringo describe cómo los hermanos Arzate y Arcega hacían rendirse a la administración municipal mediante influencia, contratos y redes de lavado aprovechando la cabeza política.

La red de empresas sancionadas

El tiradero no termina ahí: decenas de empresas de toda índole –restaurantes, bares, hoteles, hasta transportistas de municipios– fueron sancionadas por su vinculación con “Los Mayos”, en el mismo golpe de la OFAC que mandó al banquillo a Brown y sus cercanos. Aquí no hay excesos de imaginación: la lista incluye nombres, razones sociales y sanciones formales, no sólo los susurros de la grilla local.

El evento: cinismo coreografiado

Así, mientras en el evento de Sheinbaum el acarreo lucía como práctica de la vieja escuela priista y cualquier intento de protesta era interceptado por el aparato logístico, la diputada se paseaba con aire de impunidad. El poder de la música (“La Chona”) era menos demoledor que la postal política: la figura bajo investigación internacional bailando mientras la prensa y el público cargado en camiones se preguntaban por el futuro del estado… y la decencia.

El mensaje es claro: la “sorprendida” diputada no sólo exhibe su impunidad, la presume. Porque aquí, en tiempos de Sheinbaum, las pruebas sí existen y los contratos tienen nombre, apellido y 11 millones de razones para ser el centro de atención. ¿Qué falta? Que alguien quiera verlos y, sobre todo, tocarlos sin miedo.

En resumen: bailecito rosa, besos lanzados al aire, camiones llenos de acarreados y un silencio impuesto. Morena quiso vender un informe de poder y unidad, pero el verdadero espectáculo fue la impunidad convertida en performance político.

Con informacion: ELNORTEEMEQUIS/

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Tu Comentario es VALIOSO: