“SIN ser AGOREROS,TE DESMENUZAMOS el CAOS”: SON “DEPORTABLES 5 MILLONES de HISPANOS y la MITAD son MEXICANOS”…alud de consecuencias repercutirá hasta en los ingresos de Mexico,son el 3.7% de su PIB.

Ante las amenazas de Donald Trump, el número de mexicanos en riesgo de ser deportados de Estados Unidos por permanecer de forma irregular asciende a 4.9 millones, estima El Colegio de la Frontera Norte.

La mitad de esos mexicanos, señala la institución, radica en tres Estados: Texas, California e Illinois.

No obstante, remarca, en prácticamente todas las entidades estadounidenses existe población en riesgo.

Sobre las entidades de procedencia en México, se estima que 6 de cada 10 paisanos no autorizados proceden de 10 Estados: Veracruz, Guanajuato, Oaxaca, Michoacán, Jalisco, Guerrero, Chiapas, Hidalgo, San Luis Potosí y Puebla.

Además, 7 de cada 10 mexicanos no autorizados tienen más de 10 años viviendo en Estados Unidos.

“Su vida se ha hecho en aquel país”, remarca el Colegio, “han formado hogares estadounidenses.

“Por tanto”, alerta, “entre los primeros impactos sociales están: a) la deportación de familias enteras cuya vida se ha desarrollado en Estados Unidos, muchos de ellos ya no tienen parientes en México; b) la separación de familias de los hogares mixtos (con residentes legales), con principal afectación para los menores de edad”.

Las repercusiones conocidas y las aun sin conocer

La posible deportación masiva de 4.9 millones de mexicanos indocumentados de Estados Unidos tendría repercusiones profundas y multidimensionales tanto para México como para Estados Unidos. A continuación, se analizan las principales consecuencias desde diferentes perspectivas:

Impacto social y familiar

• Separación de familias: Muchos de los deportados dejarían atrás a cónyuges e hijos, algunos de ellos ciudadanos estadounidenses, causando un trauma emocional severo.
• Desarraigo cultural: Al haber vivido más de 10 años en EE.UU., muchos deportados enfrentarían dificultades de readaptación en México.
• Sobrecarga de servicios sociales: Las ciudades fronterizas mexicanas experimentarían una presión significativa en sus sistemas de salud, educación y vivienda.

Impacto económico

• Pérdida de mano de obra en EE.UU.: Sectores como la construcción, agricultura y servicios sufrirían escasez de trabajadores.
• Reducción de remesas: México vería una disminución importante en el ingreso de remesas, que representan el 3.7% de su PIB.
• Desempleo en México: El mercado laboral mexicano no podría absorber rápidamente a millones de retornados.

Impacto en seguridad y gobernanza

• Aumento de criminalidad: Algunos deportados podrían verse forzados a unirse a grupos delictivos ante la falta de oportunidades.
• Tensiones diplomáticas: Las relaciones entre México y EE.UU. se verían seriamente afectadas.
• Sobrecarga del sistema migratorio: Los centros de detención y tribunales de inmigración en EE.UU. colapsarían ante el volumen de casos.

Impacto en comunidades de origen

• Despoblación rural: Muchas comunidades en estados como Veracruz o Guanajuato perderían aún más población joven.
• Pérdida de capital humano: México recibiría de vuelta a trabajadores con habilidades y experiencia adquiridas en EE.UU..

Impacto psicológico y de salud

• Trauma psicológico: Tanto deportados como sus familias sufrirían altos niveles de estrés, ansiedad y depresión.
• Problemas de salud pública: El sistema de salud mexicano enfrentaría nuevos retos para atender a la población retornada.

Consideraciones a largo plazo

• Reestructuración demográfica: Ambos países verían cambios significativos en la composición de su población.
• Reconfiguración del mercado laboral: Sectores económicos en ambos lados de la frontera tendrían que adaptarse.
• Desafíos de integración: México necesitaría implementar programas extensivos para reintegrar a los deportados a la sociedad y economía.

En conclusión, una deportación masiva de esta magnitud tendra consecuencias devastadoras y de largo alcance, afectando no solo a los individuos deportados y sus familias, sino también a las economías, sociedades y relaciones bilaterales de ambos países. La complejidad y escala de estos impactos subrayan la necesidad de abordar la situación migratoria de manera integral y humanitaria.

Con informacion: ELNORTE/